El deporte venezolano vive en una incertidumbre que preocupa, por la falta de atención oficial y no saber el futuro de las competencias que se disputaban cada dos años, Juegos Nacionales, en una entidad designada a su debido tiempo.
Y preocupa, porque se mantiene un retraso en la edición correspondiente a la número 15, que se ha debido disputar el año pasado, pero no ocurrió así y se agota el 2016, por lo que se piensa en el próximo año.
Los Juegos Deportivos Nacionales tenían su programación cada dos años. La última edición se cumplió en el 2013, teniendo como sede el eje conformado por el Distrito Capital, Miranda y Vargas, en una programación de extraordinarios resultados.
Estos juegos se inician con el objetivo de preparar y elevar el nivel de los atletas. Se crean mediante Decreto Ley 515, del 9 de enero de 1959, por iniciativa del dirigente zuliano José Beracasa, y la primera edición se cumplió en el año de 1961; y para atletas de alta competencia, a partir de 1978, teniendo como sede las instalaciones del estado Táchira.
Han transcurrido unos cuantos años. Los Juegos Deportivos Nacionales se consideraron como los Olímpicos Venezolanos, y sus resultados permitían observar el potencial de la actividad del músculo en nuestro país.
Pero nada es eterno en la vida. Poco a poco esta programación sufriría una serie de cambios en cada edición, por lo que se estima que su futuro no es nada prometedor.
En el Táchira se disputaron esos juegos en el 2005, compartidos con Mérida y Trujillo. Ya las cosas mostraban ciertos cambios, comprometiendo el éxito de la contienda.
Siguen las competencias en diferentes sedes del país. Llegan hasta el 2013, teniendo como sede el eje que conformaron Distrito Capital, Miranda Vargas. En esa cita, por el empuje de nuestros atletas, por el trabajo de sus entrenadores, Táchira mejoró en la tabla de posiciones.
Se cumplió esa cita. El sueño de los atletas, seguir mejorando en su participación. La mirada puesta en competencias internacionales: Bolivarianos, Centroamericanos y del Caribe, Suramericanos, ir más allá, llegar a los Juegos Panamericanos y estacionarse finalmente en los Olímpicos, la máxima cita deportiva.
Se cumplen los juegos del 2013, y la siguiente edición no tiene fecha. Es decir, ni tan siquiera el Ministerio del Poder para el Deporte se ha pronunciando en relación a esas competencias.
Por este año ya no van. Y montar nuevamente los Juegos Deportivos Nacionales requiere de la organización de las asociaciones. En estos momentos, la desorganización es tal, que un alto porcentaje de esos entes no está bien constituido.
Hasta donde hemos podido conocer, los Juegos Deportivos Nacionales no aparecen en boca de los entes que tienen bajo su responsabilidad todo lo que tiene que ver con esta actividad, logística, recursos humanos, el aporte económico, instalaciones.
Es lamentable que exista tanta desidia con una actividad que reunía miles de atletas de todo el país, en ambos sexos y en pleno desarrollo, donde podían demostrar su potencial para el futuro y aspirar estar en competencias internacionales.
De acuerdo a dirigentes del deporte, los atletas estarían participando el próximo año en una serie de eventos fuera del país. Se habla de acudir a los Juegos Nacionales de Cuba, Juegos Centroamericanos, y otros eventos del mismo corte.
Sin menospreciar algunos juegos, no podemos ocultar que las dos competencias de mayor envergadura, de gran potencial de importancia, son los Juegos Panamericanos y Olímpicos, incluyendo los mundiales de cada disciplina.
Ahora, nuestra juventud espera que el Mindeportes entienda la necesidad de continuar con la programación de los Juegos Nacionales, y que el próximo año se anuncie la sede compartida para la siguiente edición de las olimpiadas criollas.
(Gustavo Carrillo)