Gremio espera en la final a Real Madrid o Al Jazira y no lo hace intimidando. El campeón de la Libertadores enseñó sus debilidades contra el Pachuca: sin el lesionado Arthur, su Iniesta, es sólo lo que Luan pueda desequilibrar…
En las semifinales contra el Pachuca mexicano necesitó agotar a los Tuzos llevándolos a su segunda prórroga en cuatro días. Sólo así lograron superar al Conejo Pérez, el veteranísimo (44 años) y pequeño portero (1,70 metros). Fue con un derechazo de Everton en el 96’ y porque el central Omar González le dejó tal hueco que casi le invitó a disparar… Todo un regalo.
Asfixiados, el Pachuca acabó con diez por la roja a Guzmán tras haber soñado con ser el primer club mexicano en jugar la final. Gremio se lo negó con la pierna dura de su central argentino Kannemann, algunos fogonazos aislados de Cortez y Luan y la frescura de Everton desde el banquillo. Parece poco para el aspirante de Sudamérica. (Redacción)