Los futbolistas no son tontos. Saben que si un club paga los 112 millones de euros que desembolsó Juventus por Cristiano Ronaldo y además le asegura un salario anual de 30 millones (es el mejor pagado de todo el Calcio) manda el mensaje claro de que será titular, por encima de todo y de todos. Ante esta situación cada uno se pregunta: ¿encajo aquí o mejor me voy?
En ese plan está, por ejemplo, el argentino Gonzalo Higuaín, directo damnificado de la llegada del portugués pues juega en su misma posición. El delantero, famoso por la cantidad de dinero que ha movido en traspasos durante su carrera (141 millones de euros en tres clubes), espera mantenerse en competencia a sus 30 años de edad y no ve la manera de hacerlo con CR7 en el equipo, por lo cual habría pedido boleta de salida.
La parte curiosa es el negocio que se ha propuesto para dejarlo salir: según la prensa italiana la idea es un canje directo de Higuaín por Leonardo Bonucci, excapitán de Juventus y un jugador emblemático del club, quien fue la gran sorpresa del mercado pasado al pasar a Milán por más de 40 millones de euros. El zaguero no está contento con el cambio y el delantero se quiere ir.
El acuerdo parece viable, especialmente porque Juventus incluiría a dos jugadores más en el canje: Benatia, un defensor perfecto para reemplazar a Bonucci y Pjaca, extremo izquierdo. Milán quisiera al central Caldara (24 años) pero tiene ofertas superiores a 30 millones de euros de varios equipos, entre ellos el Borussia Dortmund, así que no quiere arriesgar ese ingreso.
Pero Higuaín no es el único que espera salir de Turín. Su compañero Pjianic le habría comunicado ya a la dirigencia que quiere irse pero que sólo quiere hablar con dos clubes: Barcelona o Manchester City. ¿Alguno pagará los 80 millones que piden por el bosnio? Habrá que ver.
Ahora, Bonucci, cuya familia vive en Turín mientras él está solo en Milán, no es el único con ganas de regresar a Juventus. Otro que habría pedido regresar es Paul Pogba, campeón mundial con Francia, y quien no acaba de ser un hombre fijo para Mourinho en Manchester United.
El volante ha mostrado su mejor versión en el club italiano y en su selección y cree que ahora mismo, con Cristiano a bordo, el de Turín es el equipo ideal para seguir cosechando títulos. Su problema es sencillo: 114 millones de euros pagó el United por él. No es tan simple como cambiar el color de la camiseta.