AFP – La Vuelta a España-2017 comienza hoy en la ciudad francesa de Nimes, con una participación de lujo que encabeza un Alberto Contador dispuesto a despedirse del ciclismo profesional a lo grande, pero bajo un ambiente de duelo por los atentados en Barcelona.
La Vuelta-2017 se presenta con la mejor nómina de corredores en mucho tiempo, listos para dar pelea a lo largo de 21 etapas y 3.324,1 km.
Los organizadores expresaron su “solidaridad” con las víctimas de los atentados de Barcelona, que causaron al menos 14 muertos y más de 100 heridos, el jueves, a dos días del inicio de la carrera.
La Vuelta anunció “medidas de seguridad extraordinarias” para asegurar la protección del público y de los corredores.
En el plano deportivo, junto a Contador y Froome, que busca el doblete Tour-Vuelta, hombres como los italianos Fabio Aru (Astana) y Vincenzo Nibali (Bahrain-Merida), el francés Romain Bardet (AG2R) o el colombiano Esteban Chaves (Orica), tercero el pasado año en la ronda española, prometen una lucha de altura por el maillot rojo de líder.
“La Vuelta completa la mejor participación de su historia”, aseguraba hace unos días el director general de la ronda española, Javier Guillén, contento de que Contador haya elegido la Vuelta para retirarse.
“No creo que haya una despedida mejor que la carrera de casa y en mi país”, aseguraba Contador el pasado día 7 de agosto, al sorprender a todos con su anuncio de retirada.
Carrera ‘despiadada’
Ganador de tres Vueltas (2008, 2012, 2014), Contador, que correrá con el dorsal número uno, tal vez no consiga el triunfo pero, sin duda, promete combate en una prueba dada a las sorpresas.
Una Vuelta que se le sigue resistiendo a Froome, que quiere acabar con su particular maldición con un doblete Tour-Vuelta.
“La Vuelta es una carrera que me encanta, pero es despiadada”, añadió el cuatro veces ganador del Tour de Francia.
Hasta nueve llegadas en alto están previstas en esta Vuelta a España, entre ellas la situada en el inédito Alto de los Machucos, en Cantabria (norte), el 6 de septiembre, y en la 17ª etapa, con rampas que llegan al 28 %.
La Vuelta volverá también a subir, cuatro años después, al mítico Angliru en la penúltima jornada de la prueba, con lo que el duro alto asturiano (con rampas de hasta el 18 %) podría convertirse en el juez de la ronda española.
Antes de la segunda jornada de descanso, otras dos llegadas en alto. en la Sierra de la Pandera (14ª etapa) y en el Alto Hoya de la Mora (15ª). podrían servir para seguir seleccionando aspirantes al triunfo final.
Etapas para rodadores
Pero los rodadores también tendrán sus oportunidades. Ya de inicio, con una contrarreloj por equipos que podría permitir a Froome y a su Sky aventajar a algunos de sus principales rivales, y también en la 16ª etapa, una larga crono individual de 40,2 km que tendría al británico como gran favorito.
Froome mantuvo un duro duelo en la pasada ronda gala con el francés Romain Bardet (AG2R), una de las estrellas emergentes, que podría tener su segunda parte en España.
Bardet acabó en el tercer cajón del podio en París por un solo segundo y querrá mostrarse en esta Vuelta.
Ganador de la ronda española en 2010, Nibali fue tercero en el Giro y desde entonces se ha dosificado, con lo que llega descansado a Nimes, donde también le espera su compatriota Fabio Aru, quinto en el pasado Tour.
Los grandes aspirantes tampoco podrán perder de vista a una de las bazas del Orica, el colombiano Esteban Chaves, que finalizó el pasado año en el tercer cajón del podio en Madrid, o sus compañeros, los hermanos Simón y Adam Yates.