Los visitantes crearon muchos problemas al equipo de Gattuso, que suma un triunfo sin brillo antes de su visita al Camp Nou.
El Nápoles aferró tres puntos para su mantener su pelea con el Milan y la Roma por los puestos europeos, donde ya ganaron plaza tras conquistar la Coppa de Italia. Después de ocho jornadas consecutivas encajando, el equipo de Gennaro Gattuso mantuvo su portería a cero ante el Sassuolo (2-0) en un partido extrañísimo, donde el VAR anuló cuatro goles a los visitantes por fuera de juego.
El plan defensivo del Nápoles, que ni siquiera supo afianzarse tras el madrugador 1-0 de Elseid Hysaj, fue puesto a prueba por el equipo dirigido por Roberto de Zerbi. Pasada la media hora, Filip Djuricic batió a David Ospina, pero uno de los jueces de línea anuló el 1-1 por fuera de juego.
A partir de ese momento todo se complicó para Gianluca Aureliano, el árbitro de la tarde en San Paolo. En el minuto 36, Djuricic aprovechó un rechace de Ospina tras el disparo de Hamed Junior Traore para enviar el balón a la red. Sin embargo, la interminable consulta con el VAR terminó con anulación por fuera de juego previo de Traore.
LA SENTENCIA DE ALLAN
El Nápoles, que el 8 de agosto visitará el Camp Nou en los octavos de la Champions, no encontraba modo de neutralizar los constantes acercamientos del equipo de Emilia-Romaña. Nada más volver del descanso, el VAR frustró el empate de Francesco Caputo y poco después volvió a denegar el 1-1 a Domenico Berardi por fuera de juego. En ambas ocasiones, la decisión final del árbitro llegó cuando los futbolistas locales ya se disponían a sacar de centro.
Los locales, liberados de tanto sufrimiento, hilvanaron una oportunidad culminada con un remate de Matteo Politano al poste. Finalmente, ya en el segundo minuto del tiempo añadido, Allan castigó al valiente Sassuolo con el definitivo 2-0.
Pese a la lógica decepción, De Zerbi no quiso culpar al VAR de su derrota. “Lo hicimos bien con y sin balón, pero nos faltó convicción para lograr los tres puntos”, analizó el técnico del Sassuolo.