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Los abusos del fútbol: “Mi posibilidad de jugar en el extranjero dependía de dormir con el presidente”

Los abusos del fútbol:
Los abusos del fútbol: "Mi posibilidad de jugar en el extranjero dependía de dormir con el presidente"

La tierra tembló en Haití el 12 de enero de 2010. El seísmo, con una magnitud de siete grados en la escala de Richter, dejó una cifra de fallecidos que todas las fuertes elevan por encima de 200.000 (y alguna por encima de 300.000) y otra de personas sin hogar que superó el millón, más allá de la catástrofe económica que supuso para el que ya era uno de los países más pobres del planeta.

El 9 de febrero, cuatro semanas después del terremoto, Joseph Blatter se reunía con Yves Jean-Bart. “Teníamos noticias indirectas, pero no llegábamos a ponernos en contacto justo después de lo sucedido. Al cabo de unos días pude hablar con él por teléfono y les aseguro que entonces sentí un gran alivio”, explicaba a los medios el presidente de la FIFA.”Yo huía a todo correr de la sede cuando un bloque de piedra me cayó sobre la espalda y el hombro. Duele, pero estoy vivo. Jean-Yves Labaze, el entrenador de la selección sub-17, que venía detrás de mí, no tuvo la misma suerte”, relataba el de la Federación de Fútbol haitiana. “La Comisión de Finanzas ha decidido otorgar una ayuda suplementaria de tres millones de dólares. Después de la catástrofe, ya ofrecimos una de urgencia de 250.000 dólares”, completaba Blatter.

Para entonces Jean-Bart ya llevaba diez años en el cargo.El huracán Matthew llegó a Haiti el 4 de octubre de 2016. La que era decimocuarta tormenta de la temporada en el Atlántico dejó una cifra directa de fallecidos superior al millar, pero sobre todo una nueva debacle para un estado dependiente aún de la ayuda humanitaria y que seguía sufriendo hambrunas o epidemias.

El 1 de noviembre, cuatro semanas después del fenómeno, Veron Mosengo-Omba iniciaba una visita al país que incluía reunión con Yves Jean-Bart. “He venido por orden del presidente de la FIFA, para manifestar nuestra solidaridad a la familia del fútbol haitiano y también para evaluar los daños y ver cómo se puede ayudar”, señalaba el director de federaciones miembro del organismo futbolístico. “Después de casi un mes de oscuridad, desolación e incertidumbre, el sol vuelve a brillar para la familia del fútbol, especialmente en el sur, con una histórica visita de solidaridad de una delegación de alto nivel”, se congratulaba el presidente de la Federación. En abril de 2017 era el propio Gianni Infantino, sustituto de Blatter, quien acudía a la isla con un cheque de 500.000 dólares para “reafirmar compromisos”.Para entonces Jean-Bart ya llevaba 17 años en el cargo.La Naturaleza no ha tenido piedad alguna con Haití. El ser humano (algún ser humano), tampoco.El pasado 25 de mayo, la FIFA despachaba con un comunicado de tres párrafos un escándalo de abusos sexuales sobre futbolistas menores en el que Yves Jean-Bart era el principal acusado. El epicentro del terremoto. El ojo del huracán. De acuerdo con los artículos 84 y 85 del Código de Ética, podía leeerse, se suspendía al dirigente haitiano de “todas las actividades relacionadas con el fútbol a nivel nacional e internacional por un periodo de 90 días”, explicándose además que tal sanción se imponía en conexión con las investigaciones que conciernen al también apodado como ‘Dadou’. Apenas un par de días después se nombraba presidente interino a Joseph Varieno Saint-Fleu… a la sazón hombre de confianza del ‘castigado’.

90 días de suspensión, conviene insistir. Para entonces Jean-Bart ya llevaba 20 años en el cargo.Más allá de que se concreten, las acusaciones son un golpe duro para un organismo, el internacional, que había anunciado medidas de protección después de que hace apenas un año sancionara a perpetuidad a Keramuudin Karim, presidente de la Federación afgana, por abusos sexuales sobre al menos cinco jugadoras en el periodo comprendido entre 2013 y 2018. La iniciativa ‘Guardianes FIFA’ tenía como objetivos acabar con los abusos y proteger los derechos de los más jóvenes … así que a la vista está el ingente trabajo todavía por hacer. “Es parte de nuestro compromiso prevenir que ningún chico sufra daños por culpa del fútbol”, afirmó en la presentación Fatma Samoura, secretaria general de la institución que sigue presidiendo Infantino. “Proteger a los niños para que disfruten del fútbol debe ser la prioridad número uno para cualquier organización relacionada con este deporte”, añadió Greg Clarke, presidente de la Federación inglesa.

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