Venezuela sigue su calvario en el Clásico Mundial de Beisbol, y luego de superar el escollo en la primera fase, ahora enfrenta a los mejores conjuntos que han logrado mantenerse en acción.
La novena dirigida por Omar Vizquel pasó con apuros a la Segunda Ronda la noche del lunes, cuando derrotó a la sorprendente representación de Italia con pizarra de 4×3, donde Miguel Cabrera despachó un laberíntico batazo de cuatro esquinas.
No ha sido fácil para nuestra representación alcanzar su clasificación y viajar a San Diego, California, donde hoy enfrentará a la fuerte representación de Estados Unidos, un compromiso difícil para ambos conjuntos.
La travesía de los llaneros no ha sido fácil. En su primera presentación, y con Félix Hernández en la lomita, fracasó en busca de la victoria. Y peor aún, perdió por nocaut y blanqueo 11×0 frente a Puerto Rico, jugando apenas nueve episodios.
En ese enfrentamiento, se observó la debilidad de Venezuela, su cuerpo de lanzadores. No cumplió las expectativas el abridor de los Marineros de Seattle, y no llegó a lanzar más de tres episodios, perdiendo el compromiso.
Italia fue su segundo dolor de cabeza. Un equipo al que se consideraba como la cenicienta, pero demostró que en el deporte no hay rival pequeño, y puso en apuros a los criollos. Mostró un equipo que aspira muchas cosas en el deporte de las cuatro esquinas.
Se comprometió el pitcheo del equipo que dirige Vizquel, al punto de recibir diez carreras y perder por una, lo que significó un triunfo importante para los venezolanos, viendo en el calendario oficial del Grupo “D” en el horizonte, a un rival difícil, México.
Con una victoria y una derrota, le correspondió el día domingo contra los aztecas. Vizquel abrió con Yusmeiro Petit, pero pronto se complicó la situación y en un toma y dame, México ganó el compromiso para colocar a su rival contra la pared.
Pitcheo y ofensiva, han sido las fallas de Venezuela. Un conjunto donde aparecen en la alineación: José Altuve, Miguel Cabrera, Carlos González, Salvador Pérez (fuera del equipo por lesión), Victor Martínez, Martín Prado, no ha podido descifrar los lanzamientos del pitcheo de sus contrarios.
Pudo despertar ante Italia, pero pasó apuros para ganar y frente a los aztecas se quedó en el camino ese poder remolcador y remontar los resultados adversos. Perdiendo con México, y con par de derrotas y una victoria, se presentó un triple empate, que se decidió por los reglamentos del Comité del Clásico. El repechaje lo jugaron Italia y Venezuela.
Omar Bencomo, un lanzador que ha tratado de regresar al beisbol de los Estados Unidos, fue designado para abrir frente a Italia, un conjunto que gana muchas cosas en su presentación en el torneo.
Pronto mostró sus deseos de avanzar a la siguiente ronda y puso en apuros a los llaneros. En la parte baja del primer tramo, los italianos anotaron la primera carrera, y pusieron en apuros a su rival. En el sexto tramo, Inciarte impulsó con un sencillo la carrera de la igualada, pero luego Italia se puso al frente 2×1.
Un juego complicado. Buen pitcheo por parte de Italia y el relevo venezolano tratando de controlar al rival. Miguel Cabrera igualó las acciones a 2 con un jonrón, y se produce un rally que permitió a Venezuela trío de carreras para ganar el compromiso 4×3.
Regresa “El Rey”
Hoy se inicia la segunda fase del Grupo “F”. El compromiso es difícil. Enfrentar a Estados Unidos con un pitcheo débil como el que presenta Venezuela, no ofrece ninguna garantía, por el poder ofensivo del contrario.
Omar Vizquel, tratando de ir más allá de la primera fase, designó a Félix Hernández para trabajar en ese encuentro, luego de caer frente a Puerto Rico en su primera presentación el pasado viernes.
Su bullpen no presenta mucho material. Esperaba poder incluir a Eduardo Rodríguez, pero Medias Rojas de Boston le negó el permiso, por cuanto el joven monticulista viene de una lesión en la rodilla.
De acuerdo a los resultados, juego tras juego el estratega tratará de llevar al máximo a sus lanzadores, porque luego de Estados Unidos, tendrá que enfrentar a República Dominicana y Puerto Rico, una tarea difícil para nuestra selección. (Gustavo Carrillo)