El Atlético de Madrid ha firmado el peor arranque, tanto en puntos como en goles a favor, de la era Simeone. Un equipo sin ideas en ataque y que tiene la pólvora mojada en la competición doméstica, sumando solamente 7 goles en las 8 jornadas que llevamos. Parecía impensable tras el verano que los tres de arriba le regalaron al aficionado atlético, pero es precisamente a ellos a los que más se les debe exigir, y los que menos están demostrando.
Faltos de ocasiones y de generar peligro, así podríamos definir cada partido liguero de Joao Félix, Morata y Diego Costa, un tridente que parecía que iba a aterrorizar al mundo, y a los únicos que transmite miedo es a los aficionados del Atlético que ven tambalearse sus sueños de esta temporada. El ejemplo más claro lo tenemos en el encuentro del pasado domingo, frente al Valladolid, donde ninguno pudo crear peligro y tuvo que ser Correa quien generase la mayor oportunidad rojiblanca.
Entre Morata y Diego Costa suman 2 goles en LaLiga y 0 en la Champions. Joao Félix solo les aporta 2 en el campeonato doméstico y 1 en Europa, en total 5 goles de un tridente al que seguramente no le falten ganas de competir, pero sí de entendimiento. Parece evidente que la compenetración entre los dos delanteros es nula, ni Diego con Álvaro, ni Álvaro con Diego, pero Simeone parece casado a una idea basada en que si los dos están bien van a jugar, se equivoca.
El técnico argentino no ha trabajado la compenetración entre ambos, y es que es muy difícil que dos rematadores busquen al otro, obedecen a su instinto depredador. El juego del Atlético en Pucela fue plano y sin ideas ofensivas, pelotazo y a bajarla, así es muy difícil. Complicado porque los rivales saben cuál va a ser tu movimiento y se anticipan, y complicado porque dejas a tu mayor generador de juego sin entrar al partido. Y así lleva el Atlético ya varios años… algún día habrá que preguntarse por qué los Rodrigo o Lucas no pusieron demasiado impedimento en irse, pero ese es otro tema, generado de esta falta de juego, eso sí.
Aunque, seamos sinceros, Joao la busca, Morata se desmarca, y Diego Costa… Diego Costa lleva desde su vuelta demostrando que no es el mismo. El de Lagarto provoca muchas perdidas de balón a sus compañeros y falla lo que un equipo ganador no puede, ejemplo claro la oportunidad a portería vacía en Moscú. Pero Simeone parece anclado a la idea de que el mejor Diego Costa volverá, mal pensamiento porque mientras se le espera el Atlético lleva dos empates a cero y la sensación de que las ilusiones creadas este verano se han ido al garete. De su idea no le van a sacar, si los tres están bien van a jugar, LaLiga sigue y los rivales se van alejando.
Y por último, de un tridente donde el que más te genera es siempre el objetivo número uno en los cambios de su entrenador, ¿qué podemos esperar? Joao es el jugador más sustituido del campeonato, no lo digo yo, lo dicen los números. No creo que deba jugar ni por lo que costó ni por gusto del entrenador, creo que debe jugar por lo que aporta, y este mismo hilo podemos aplicarlo a por qué no debe hacerlo Diego Costa. Cuando no hubo tridente y Morata estuvo arriba, el Atlético generó más que con los tres, da que pensar.
La pólvora mojada, el marketing de un esquema que no funciona y el imposible de sacar a Simeone de sus planes son ahora mismo el lastre de un Atlético que se iba a comer las tres competiciones y que muestra un nivel muy distinto. Sale Joao Félix y entra Correa, que no se les vaya de la cabeza que lo escucharan muy a menudo.
Adrián Lez / 90min
Prensa de Madrid: El tridente del Atlético tiene más marketing que funcionamiento
95 views
- Advertisment -