“Gloria al vencedor y honores al vencido”, un viejo y reconocido adagio popular que enaltece al caído cuando fue digno de la batalla, frase que hoy recala –perfecta y merecidamente- al cuadro de Estudiantes de Guárico, club venezolano que escribió otra página más en el balompié femenino nacional al quedar subcampeón de la Copa Libertadores de la especialidad.
Tras sostener un reñido y parejo duelo con su rival, el Sportivo Limpeño, de Paraguay, las criollas no pudieron mantener la ventaja del 1×0 conseguida al comienzo de la segunda mitad, gracias al tanto obtenido por Paola Villamizar, y terminaron, sobre la hora, perdiendo la gloria que era de ellas.
El encuentro se disputó durante la noche del martes 20 de diciembre en el estadio Profesor Alberto Suppici, ubicado en la ciudad uruguaya de Colonia. Allí, las venezolanas jugaron de tú a tú y sin complejos ante un contrincante que también hizo sus méritos para hacerse con la gloria del certamen, pero que aprovechó la expulsión de una jugadora criolla para valerse de su mayoría numérica y tomar las riendas del compromiso, encerrando a las académicas, terminando por emparejar y posteriormente darle vuelta al marcador, para de esta manera ser las campeonas de la Copa Libertadores Femenina 2016.
La primera mitad fue de infarto, muy pareja y con peligrosas llegadas para ambos combinados, mas sin embargo ninguno pudo concretar, guardándoselo todo para el segundo tiempo. Villamizar y Cinthia Zarabia buscaron perforar la valla guaraní, defendida por Kimika Forbes, pero sus intenciones fueron en vano. Mientras tanto las paraguayas propusieron con Rosa Aquino y Jéssica Martínez.
En los primeros 30 segundos del tiempo complementario se abrió el marcador, luego de Villamizar quedar mano a mano con Forbes y le batiera sin ningún problema, sin ponerse nerviosa mandó el esférico al fondo de las redes, colocando la ilusión en los pechos venezolanos.
Poco a poco el juego se tornó brusco, la pierna fuerte fue apareciendo, producto de ello llegó la expulsión para Estudiantes, puesto que al 64´ Maikerlin Astudillo vio su segunda tarjeta amarilla y fue echada del encuentro, acción que cambió el destino del partido, ya que Limpeño aprovechó la superioridad numérica y se fue en ataque, apabullando a las de Guárico. Liz Peña igualó el marcador con un tiro cruzado al 71´, mientras que a falta de un minuto para el final, Damia Cortaza sacó un derechazo desde la media distancia para batir a la portera criolla Lisbeth Castro, y que con ayuda del travesaño se incrustó en el fondo del arco. (Favio Hernández)
Estudiantes de Guárico, merecidas subcampeonas de Copa Libertadores
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