La Vuelta al Táchira en Bicicleta de 2017 como en su época de oro, calidad y cantidad de corredores, la presencia de los mejores exponentes del país junto a un selecto grupo de ruteros del exterior, un total de 11 escuadras foráneas y 24 nacionales, para un gran universo de 210 participantes.
El regreso de alemanes, suizos y mexicanos, sangre europea y “azteca”, que en las décadas de los setenta y ochenta estuvieron transitando por carreteras del Táchira y en otras entidades del país se convierte en algo gratificante para una competencia que pese a las vicisitudes, las altas y las bajas, sigue siendo muy apetecida en el exterior.
No han sido invitados de siempre, pero cuando han venido lo han hecho con mucho profesionalismo, colocando en alto las banderas de sus países, sin dar lástima arriba de la bicicleta, justifican su presencia ante los ojos del mundo.
Una incógnita el nivel de los invitados
La eterna polémica en relación a la forma con que llegan a competir los ciclistas extranjeros continúa siendo el gran misterio para la organización de la carrera y para los propios aficionados; sin embargo, la no realización del Tour de San Luis en 2016, una competencia joven que se venía celebrando desde 2007, con calificación 2.1 ante la Unión Ciclista Internacional (UCI), trajo consigo que algunos de los equipos voltearan la vista hacia la Vuelta al Táchira (2.2) que coincide en fecha con la propia carrera “albiceleste”.
Todo apunta a que el nivel de buena parte de los invitados del exterior para la fecha que comience el giro tachirense será aceptable, por lo menos un sesenta o un poco más de condiciones, que es bueno para terminar de enderezar las cargas en las carreteras de los estados Barinas, Mérida y Táchira, sitios por donde transitará la caravana multicolor.
Basta con devolver las hojas del calendario para sacar como conclusión que no es tarea fácil tener en acción a elementos que se encuentren en buenas condiciones para pelearles los primeros puestos a los corredores del patio, tal como ocurría en el pasado, pasando a ser los foráneos unos simple invitados de piedra, sin nada que aportar para el espectáculo.
Los colombianos, que tuvieron una hegemonía desde el nacimiento de la Vuelta en 1996, hasta 1973 cuando el desaparecido Santos Rafael Bermúdez le dio el primer título individual a Venezuela, desaparecieron del panorama, apenas con triunfos esporádicos más adelante, entre los que destacan las conquistas de Luis Moreno, José Díaz, Angel Yesid Camargo, Raúl Gómez y Hernán Darío Muñoz en los años 1989, 1990, 1991, 1996 y 1997, respectivamente
Un batacazo lo sucedido este año, una victoria inesperada del costarricense Josep Chavarría, quien en la última etapa le quitó el manjar de la boca al tachirense José Mendoza, quien portaba la casaca de líder, defendiendo los colores del equipo Flor de Patria de Trujillo.
¿Vendrán los colombianos a reverdecer laureles…?
Con cuatros equipos, un total de 24 ruteros, los vecinos neogranadinos tienen con que pelearles el título a los anfitriones tachirenses, pero siempre y cuando vengan en un buen porcentaje de preparación, concretamente con el equipo JB Ropa Deportiva, sin desmeritar el nivel que tengan los otros tres conjuntos.
El gran interrogante: ¿vendrán los “escarabajos” neogranadinos en busca de reverdecer viejas glorias? Vaya uno a saber, pero lo importante está en que vienen en plan de disputar con todas las de la ley el apetecido galardón de campeón.
Otro que regresa, el Androni Giocatolli Sidermec, bajo la batuta del sempiterno Gianni Savio, un director deportivo ganador de varios títulos en la Vuelta al Táchira y por lo tanto conocedor del evento hasta el tuétano. ¡Ojo con esta divisa…!
Por los lados de Cuba, invitado de última hora, lo mismo que México y República Dominicana, habrá que ver en qué condiciones llegan, conociendo de la exigencia del recorrido de 2017, donde el 70 por ciento de la carrera se transitará por terreno de montaña.
(Homero Duarte Corona)