Una espera de 990 minutos, once partidos, para que Venezuela lograra el primer triunfo en la eliminatoria Sudamericana de cara al Mundial de Rusia 2018; un contundente y lapidario 5-0 frente a Bolivia, con testimonio de unos 50 mil espectadores que se dieron cita en el estadio Monumental de Maturín.
Una victoria esperada y de repente inesperada por lo cosecha de goles conseguidos por la Vinotinto, con un triplete de Josef Martinez, ficha del Torino de Italia, sumado al tanto de Jacobo Kouffati y otro de Rómulo Otero, con la cual Venezuela abandona por primera vez en el certamen continental el oscuro y frío sótano de la tabla de posiciones.
La “Revolución de los chamos”, pues las conquistas fueron obra de la generación de relevo, jóvenes menores de 25 años, fiesta del gol que inició Jacobo Cuffati a los 3 minutos y aumentó Josef Martínez a los 10, para un 2-0 cómodo al término del primer tiempo.
Superior Venezuela, un verdadero aluvión en los primeros 15 minutos, para bajar el ritmo y manejar el compromiso con mayor parsimonia pero siempre llevando peligro a los predios del arquero Campel del seleccionado visitante.
Para el complemento, el conjunto nacional siguió apostando a la velocidad, empuje, coraje y ganas de los inspirados Rómulo Otero, Jhon Murillo, Josef Martínez y con ellos e resto del colectivo, que sin piedad le pasó por encima a un rival boliviano que no atinó nunca a detener el ímpetu de un antagonista que dio rienda suelta a una sed de victoria que estaba atragantada hacía mucho tiempo.
A los 68 y 70 minutos dos nuevas dianas de Josef Martínez para el 4-0 contundente, el primer triplete de un jugador criollo con la selección en nacional en toda la historia, mientras que el 5-0 para el triunfo definitivo fue otra de Rómulo Otero, a los 75 minutos, en lo que fue una gran actuación del volante nacional que juega en la Primera División del balompié brasileño.
El camino a Rusia 2018 hace rato que quedó a la vera del camino, pero sin duda que una victoria de este tipo, donde el elenco patrio ganó, gustó y goleó es de gran aliciente con miras a futuros compromisos, especialmente el del venidero martes frente a Ecuador en Quito, selección que está metida dentro del selecto grupo de equipos que ahora mismo están entre los cinco primeros de la tabla de posiciones en su objetivo de la justa universal rusa.
Hacía tiempo que la Vinotinto no le daba una alegría de este tipo a la afición nacional, y sucedió en la noche del 10 de noviembre en el escenario de mayor capacidad con que cuenta el fútbol venezolano, el Monumental de Maturín, que esta vez se adornó con 50 mil almas pujando por su selección, independientemente el pésimo estado del campo de juego.
Seguramente vendrán más alegrías, existe el material humano para ello, pero por encima de todo un puñado de elementos jóvenes que fue el mejor caldo de cultivo para lo que se avecina en el futuro, independientemente el camino a Rusia 2018 no exista, pero si lo que será la cita mundialista de 2022.
(Homero Duarte Corona)