Gracias al Giro Andino, el Táchira, como entidad, y Venezuela, como país, se dieron a conocer en el mundo entero, luego de ganar San Cristóbal el derecho de montar, primero, los Panamericanos en 1976 y luego los Mundiales de Ciclismo en 1977.
Mucha agua ha corrido debajo de los puentes desde entonces, la presencia de corredores venezolanos en el exterior, con triunfos importantes como los alcanzados por Leonardo Sierra y José Rujano, ambos merideños, nacidos en Santa Cruz de Mora, por solo nombrar dos de los más exitosos gracias a sus conquistas.
Sin embargo y pese a estos logros, aún el ciclismo tachirense continúa sin lograr un sitial de honor a nivel organizativo, independientemente los esfuerzos que se han hecho por parte de dirigentes, exciclistas, empresarios, políticos y, en fin, quienes de una u otra forma aman y sienten la disciplina.
Nuevas autoridades para la ATC
La Vuelta al Táchira en Bicicleta, la razón de ser del ciclismo en el Táchira y Venezuela, por ese gran universo que se desvive por la carrera de mayor relevancia a nivel de etapas en el país y una de las primeras en el concierto continental, aún sigue sin conseguir la varita mágica para su autofinanciamiento, no depender de nadie, menos de la parte gubernamental, sin importar quiénes estén en el poder.
Desde el nacimiento del importante giro ciclístico, hace más de medio siglo, han desfilado por la Asociación Tachirense de Ciclismo muy buenos dirigentes, unos más, otros menos, pero sin que ninguno haya podido darle el nivel que se merece el Giro local, todo ha quedado en buenas intenciones.
De cara a la elección de las nuevas autoridades del pedalismo regional, quienes dirigirán sus destinos en los próximos cuatro años, se anuncian tres planchas: una presidida por Porfirio Ortega, quien va por la reelección, acompañado por el periodista Hugo Hernández en la vicepresidencia, además de otros dirigentes; otra comandada por Norberto Ulloa, dirigente y pequeño empresario, respaldado en la vicepresidencia por el entrenador Arlex Méndez, y una tercera opción encabezada por William Rodríguez, vicepresidente de la actual Asociación Tachirense de Ciclismo.
Diario La Nación platicó con William Rodríguez, quien no esconde sus pretensiones de ser el nuevo mandamás del ciclismo en el estado, y para ello “tengo méritos, vengo inmiscuido en estos avatares hace 38 años, cuando el profesor José Vicente Sánchez Frank fue presidente de la ATC, yo era su asistente”, sentencia.
—Desde entonces -apunta el empresario y dirigente-, apenas estuve fuera del ciclismo por dos años—, cuando ocupó la presidencia del Deportivo Táchira, para luego regresar de nuevo a la dirigencia del pedal y sin ser un soldado más de esta causa.
“Quiero ser el presidente de la Asociación Tachirense de Ciclismo, y para ello me he rodeado de un buen grupo de dirigentes, entre los que destacan Énder Rosales, en la vicepresidencia, hombre ligado a la Vuelta de la Juventud durante varios años; el profesor Hugo Murillo como secretario, además de Jairo Borrero en la suplencia de la presidencia, entre otros”, esgrime Rodríguez.
De los 13 clubes actualizados ante el Instituto Nacional del Deportes y el Ministerio del Deporte, William Rodríguez cuenta con el aval de 6; Porfirio Ortega tiene el apoyo de 4, y a Norberto Ulloa lo respaldan 2 o 3, esto de acuerdo con los sondeos hechos por cada uno de los aspirantes.
Pero no será sino hasta la próxima semana cuando la Comisión Electoral, presidida por Pedro Bonilla, llame a elecciones, luego de la suspensión el pasado miércoles ante la problemática que existe en el estado, que privó a los otros integrantes del ente comicial trasladarse hasta la capital tachirense.
(Homero Duarte Corona)
Vientos nuevos en la ATC
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