Un comienzo feliz de Jesús Enrique Colombo en territorio español, salió a hombros por la puerta grande en Santisteban del Puerto, después de cortar par de orejas, una a cada novillo de los dos que le tocaron en suerte, hierro de la ganadería del Cotillo.
Una tarde de buen augurio la del pasado sábado 14 de mayo para el hijo de la “Perla del Torbes”, en el comienzo de la temporada 2016, una clarinada de lo que se avecina, superar con creces lo hecho en el 2015: 44 orejas y 7 rabos.
No fue la espada la mejor aliada del joven novillero tachirense, tardaron en doblar los dos novillos, sin embargo esto en nada privó para que la presidencia premiara su buena labor muleteril, corroborando una vez más de todo lo aprendido en los más de tres años que lleva de campaña en la “Madre patria”.
Le esperan una serie de compromisos a Jesús Enrique a partir de este momento en plazas españolas el venidero mes, y en julio en Mont Marzan, donde de nuevo saldrá a relucir todo lo que lleva intrínseco el novillero venezolano, quien tiene como meta convertirse en matador de toros, recibir el doctorado en el difícil arte de Cuchares. (H.D.C.)