Este viernes 29 de diciembre se cumplirán cuatro años del accidente de esquí que sufrió Michael Schumacher en la estación francesa de Meribel. Un drama de graves consecuencias para el heptacampeón mundial de Fórmula 1, del que desde entonces no se tienen noticias por estricto deseo de la familia.
A raíz del accidente, mucho se ha especulado sobre sus secuelas y el alcance exacto de las lesiones del ‘Kaiser’. La ‘ley del silencio’ impuesta por su esposa Corinna y trasladada a la prensa por la antigua portavoz de Michael, Sabine Kehm no hace excepciones. La revista ‘Bunte’ fue condenada en los tribunales por publicar una información de que ‘Schumi’ había empezado a caminar, lo que parece poco probable. Y el presunto ladrón del historial médico del piloto se suicidó tras ser detenido en la cárcel de Zurich, en 2014. Por supuesto, tampoco ha trascendido ninguna imagen del piloto desde aquel fatídico 29 de diciembre de 2013.
Schumacher, que el próximo 3 de enero cumple 49 años, fue ingresado en el hospital de Grenoble tras su caída en Meribel, que le provocó graves daños cerebrales. Allí permaneció en coma inducido durante seis meses, hasta que despertó. Posteriormente, fue trasladado a su mansión en Gland (Suiza). Allí, Corinna hizo instalar una habitación específicamente adaptada para que Michael pueda recibir la atención de un costoso equipo de médicos, enfermeras y fisioterapeutas las 24 horas.
“La condición física de Michael ayuda y hay leves señales de esperanza. La familia se aferra al milagro médico de su recuperación”, reveló a la prensa alemana un amigo de los Schumacher en noviembre pasado. Es lo último que se ha sabido del caso. Muy pocas personas han podido romper las restricción familiar y visitar a Michael en su casa. Entre ellos, el presidente de la FIA Jean Todt, Ross Brawn o Felipe Massa, que trabajaron con él en Ferrari y que han evitado pronunciarse públicamente sobre su estado de salud.
Willi Webber, ex manager del piloto alemán, encabeza el sector crítico con la privacidad exigida por la familia Schumacher, ya que considera que los fans del piloto deberían conocer más detalles acerca de la situación real en la que se encuentra.
Con o sin noticias, Michael Schumacher sigue ocupando un puesto de honor en la Fórmula 1 gracias sus 7 coronas mundiales (1994 y 1995 con Bennetton, y de 2000 a 2004 con Ferrari), 91 victorias, 155 podios, 68 poles y 77 vueltas rápidas en 19 temporadas. (Redacción)