RUSIA.- Andrés Iniesta, segundo capitán de la selección española, transmitió la preocupación que tiene por palpar “un pesimismo excesivo” por la imagen de España en el Mundial 2018, y consciente de que se “debe mejorar”, dejó claro que “los primeros críticos” son los propios jugadores.
“Soy consciente de que hay cosas que se pueden mejorar, pero palpo un pesimismo excesivo. Sabemos que las sensaciones no son las esperadas, pero se comprobó que todo cuesta muchísimo y pese a que tenemos una súper selección, es difícil. Los primeros críticos somos los jugadores”, dijo.
Subir el nivel
Desde ese punto de autocrítica, Iniesta está convencido de que para seguir en el Mundial, las prestaciones de España deben ser mayores: “Se debe mejorar porque con lo que hemos hecho hasta ahora posiblemente que ante la anfitriona no nos alcanzará”.
“Estoy convencido de que este equipo tiene la capacidad y el nivel para seguir avanzando. Si las cosas no van bien, ya pensaremos en el futuro, pero que no se instale ese pesimismo excesivo”, pidió.
Dar lo mejor
En lo personal defendió su nivel, sin entrar a responder a la corriente que pide su suplencia para que juegue en las segundas partes. “No soy nadie para reprochar nada, cada uno tiene su opinión. Siempre he intentado dar lo máximo y hacer lo mejor posible. Es mi única elección. Dar lo mejor de mi”, comentó.
“Cada uno tiene su visión y opina. Al final uno sabe como está y como se siente, lo que puede aportar. Soy una persona que en vez de ver el vaso medio vacío siempre lo veo medio lleno. Soy positivo respecto a mi y el colectivo”, expresó.
Situación difícil
Admitió que lo ocurrido antes del inicio del Mundial con el despido de Julen Lopetegui, generó situaciones difíciles. “Fue una situación complicada. Para el míster, cuerpo técnico, jugadores, presidente de la Federación. A nadie nos gustó vivirla”, dijo.
“Desde ahí el grupo respondió bien. Cada uno dijo lo que creía. Más allá de la situación incómoda, nos unía al objetivo de ganar el Mundial”, confesó. Y señaló que todos tienen “una confianza al cien por cien” en Fernando Hierro.