Hay un dicho un poco cliché, pero igual de cierto que dice: “Todo vuelve en la vida”.
Ronald Koeman desarmó al Barcelona, prescindió de Luis Suárez y esto hizo enojar a uno de los máximos ídolos azulgranas, Lionel Messi, quien se fue del club después de 20 años. La despedida del Pistolero fue por teléfono, a través de una llamada que duró 40 segundos. Al DT neerlandés le hicieron lo mismo.
Ayer, caer ante el Rayo Vallecano por LaLiga fue la gota que rebasó el vaso, por lo cual la comisión directiva del club culé que preside Joan Laporta decidió destituir al entrenador horas después del resultado, mientras este regresaba del viaje a Madrid. ¿Cuánto habrá durado esta llamada? No se sabe, posiblemente oscile en el mismo tiempo que Suárez recibió la dura noticia de que no lo tendrían en cuenta.
Luego, procedieron a hacerlo público: “El FC Barcelona ha destituido esta noche a Ronald Koeman como técnico del primer equipo”, afirmó el club en un comunicado, precisando que el presidente Joan Laporta se lo ha comunicado al entrenador.
El entrenador había arribado al azulgrana hacía un poco más de un año, procedente de la selección neerlandesa.
¿Qué fue del equipo catalán que peleaba los primeros puestos de la tabla año tras año en LaLiga? No se sabe, pero el camino hacia allí esta temporada no será con Koeman. Los hinchas lo habían increpado e insultado a la salida de la derrota en el clásico ante el Real Madrid y ayer volvió a caer 1-0 ante Rayo Vallecano, el ascendido para esta temporada.
Bajo su dirección, Barcelona se desplomó hasta el noveno lugar de la tabla de posiciones de LaLiga, con solo 15 puntos de los 30 disputados. Dejó al equipo comprometido en la clasificación en la Champions League, tras sufrir goleadas ante Bayern Munich y Benfica, y vencer por la mínima a Dinamo Kiev.
Esta es la cuarta vez que Koeman es despedido de su puesto de entrenador. Ya le había sucedido durante sus campañas en en Valencia FC, AZ Alkmaar y Everton.
Despido de Koeman: se lo comunicaron en el avión de vuelta a Barcelona tras una reunión de crisis
Cuando Ronald Koeman compareció en la rueda de prensa posterior a la derrota del Barcelona frente al Rayo Vallecano, tercer partido perdido en lo que va de Liga y quinto en total, aún no sabía si iba a ser despedido o no. Horas después, cuando estaba volviendo a casa en avión, se lo comunicaron.
Las horas que pasaron entre el partido en Vallecas y el comunicado que hizo oficial el despido del neerlandés fueron frenéticas, tanto en la ciudad condal como en la capital. Los jugadores, apesadumbrados por la situación y totalmente agobiados por las críticas recibidas, se fueron al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas sin muchas ganas de hablar, y conscientes de que era más que probable que no volvieran a jugar a las órdenes de Koeman.
El entrenador, por su parte, tampoco tenía muchas ganas de seguir. Lo vivido después del Clásico, con su esposa como testigo en primera persona, fue un punto de inflexión en su pensamiento de seguir adelante, pero no fue necesario que él diese el paso, porque la directiva ya le había sentenciado.
Joan Laporta ya estaba notablemente incómodo en el palco de Vallecas. Tanto por la imagen mostrada como por el resultado, no hizo más que recibir mensajes de que la situación ya era insostenible.
Por eso, nada más llegar al avión, empezó a hacer llamadas. El núcleo duro de su directiva lo tenía claro: Koeman no podía seguir más. El presidente culé admitió la evidencia y fue a hablar con el entrenador en pleno vuelo: allí mismo le dijo que estaba despedido. Una vez aterrizado en Barcelona, convocó a las partes involucradas en el Camp Nou para una reunión de urgencia con la que trazar el plan para las próximas fechas que pasa, entre otras cosas, por llegar a un acuerdo con Xavi Hernández para que cumpla su sueño de dirigir al Barça. Pasada la media noche, Laporta y su directiva salieron del estadio para descansar después de una (otra) noche de cuchillos largos en el barcelonismo.
Koeman se despedirá de la plantilla este jueves antes del entrenamiento, que será a las 17:00h y no a las 11:00h como estaba inicialmente previsto. Una vez que recoja sus cosas de la Ciudad Deportiva Joan Gamper habrá puesto fin a su trabajo allí. Su sustituto interino será otro futbolista que militó en las filas culé: Sergi Barjuán, el actual técnico del Barça B.