El Barcelona está trabajando contrarreloj para llegar a un acuerdo con Xavi Hernández. El que fuera eje del club como capitán y dueño del estilo ‘cruyffista’ es el elegido para sustituir al defenestrado Koeman, y aunque no es la primera vez que le tantean, parece que esta va a ser la definitiva. Él quiere, el club quiere y el acuerdo no debería ser complicado… o sí.
La operación se ha encontrado con una piedra en el camino que no es fácil de sortear. La crisis económica que atraviesa el club es una piedra en el camino. Xavi tendrá que renunciar notablemente a sus emolumentos para que cuadren las cuentas por culpa de dos palabras que ya se llevaron por delante la continuidad de Messi: el límite salarial.
Aunque los primeros contactos entre el Barça y Xavi se han producido (y se llevan produciendo desde hace meses), el club tiene que cuadrar las cuentas. Ferrán Reverter, director general del club, confirmó días atrás que tenían un margen salarial de 20 millones más 3,9 que le concede LaLiga. Eso era antes de las renovaciones de Pedri y Ansu Fati y antes de contar con los 13 millones de finiquito que deben abonarle a Koeman, como apunta Ramón Álvarez de Mon, experto en estos asuntos que fue uno de los primeros en advertir lo que iba a suceder con Messi desde meses antes.
Para que Xavi fiche por el Barça va a tener que ceder mucho económicamente. Reverter anunció espacio salarial de 20 y la Liga le concede 3,9. Pero entre las renovaciones de Ansu y Pedri y la indemnización de Koeman (hablan de 13), se va casi todo.
— Ramón Álvarez de Mon (@Ramon_AlvarezMM) October 27, 2021
Xavi renovó en mayo con el Al-Sadd, club en el que se ha formado como técnico y donde se ha convertido en toda una leyenda, pero con una cláusula liberatoria en caso de que le llamase el Barça de su corazón. Eso implica que el club catarí no recibiría una indemnización tan alta como, por ejemplo, sí tuvo que asumir Koeman para dejar la selección neerlandesa, 6 millones de euros, que corrieron de cuenta del club por entonces presidido por Josep María Bartomeu.
El problema es el coste del sueldo de Xavi y su cuerpo técnico. El límite salarial del Barcelona tras las últimas operaciones pone como tope 2,9 millones tanto para el entrenador como para sus ayudantes. Tras su última renovación, Xavi cobra 10 millones de euros del equipo catarí.
Si el Barça le quiere fichar, este tendrá que renunciar a casi un 70% de su sueldo actual, más lo que tenga que ceder para incorporar a un segundo entrenador y un preparador físico, como poco. Koeman cobraba casi 7 millones por temporada.
Mientras se resuelve el caso, el entrenador interino del Barcelona será Albert Capellas, actual responsable del fútbol base.