El abandono en que se encuentra el estadio Metropolitano de Pueblo Nuevo encendió las alarmas en la Asociación de Béisbol, por considerar que ese deterioro va en aumento y la instalación se utiliza para cumplir la programación de la disciplina.
Es lamentable el estado que presenta el diamante construido en la parte alta de la ciudad, con motivo de los Juegos Deportivos Nacionales del 2005, pese a que allí no se disputaron compromisos del calendario oficial de esas competencias.
Considerado como uno de los mejores estadios modernos del país, el Metropolitano ha servido para albergar encuentros correspondientes a la temporada oficial de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, así como de diferentes categorías, y uno que otro concierto de música en varios estilos.
Sin dolientes…
Juan Alberto Martínez, presidente de la Asociación de Béisbol, mostró su preocupación por el abandono que presenta la instalación. Señala que en más de una oportunidad han denunciado la situación a los organismos correspondientes, al Ministerio del Deporte, pero no se observa ningún interés por corregir las fallas existentes.
Señala el dirigente del béisbol que para desarrollar compromisos del torneo regional han dedicado parte de su tiempo al corte de la grama en aquellas zonas donde su crecimiento afecta el desarrollo de los juegos.
Fallas en el alumbrado y servicio de agua forman parte del menú de problemas que presenta la instalación, que de acuerdo al dirigente es utilizada para albergar un Grupo Antimotines de la Policía Nacional, lo que convierte al escenario deportivo en un sitio con limitado acceso para quienes practican el deporte de las cuatro esquinas.
Y ese problema del agua, dice “Beto” Martínez”, afecta a los mismos funcionarios, quienes se ven obligados a utilizar latas para proveerse de agua, por cuanto las bombas de succión no funcionan.
No cuentan quienes utilizan el estadio con un buen servicio de los baños, lavamanos, las motobombas se han dañado y, lo peor, no se habla de reparación.

Grave la situación que se presenta con las instalaciones deportivas. Y más grave aún que ningún organismo del Gobierno se haga responsable, y se pelotean la situación. El Ministerio del Deporte no asume la responsabilidad, porque ese despacho se maneja desde Caracas, y ahí se tranca toda gestión que se realiza.
Dice Martínez que la denuncia tiene como objetivo despertar la responsabilidad de los organismos, que se tomen las acciones del caso en forma rápida y evitar que el deterioro aumente diariamente, hasta llegar al momento en que el costo de la reparación aumente las trabas y no se pueda utilizar el diamante.
Mientras en Caracas se habla de una atención óptima al deporte, en la región no solo el estadio Metropolitano, sino la mayoría de instalaciones, presentan un estado deplorable y, de no atenderse inmediatamente, su deterioro será inevitable.
Gustavo Carrillo