Xabi Alonso ha hablado en una extensa charla con Ecos del Balón, en la que ha repasado diferentes temas de su carrera profesional. Entre otras cosas, ha hablado de cómo el Real Madrid diseñó un plan para frenar a Leo Messi, de Karim Benzema, Guardiola, y un largo etcétera.
Sobre el Barça de Guardiola y Leo Messi, no ha dudado en reconocer el quebradero de cabeza que supuso intentar anular al argentino: “Messi me ha hecho mucho daño, yo lo he sufrido mucho. Nos hizo estrujarnos mucho la cabeza. Hablábamos mucho con Mourinho y con Sergio (Ramos). ¿Cómo nos estaba haciendo daño? ¿Cómo lo podíamos controlar? Jugaba Messi y, por detrás, de interior derecho, Xavi. Y te provocaban. Xavi me enseñaba el balón, yo iba, Messi se metía en mi espalda y tenía que salir Sergio a por él, y nos machacaba. Sólo empezamos a controlar a Messi cuando fui yo, y no Sergio, quien se encargó de su desmarque. Xavi me llamaba, pero yo me quedaba con Messi y así Sergio no tenía que salir, y a partir de ahí, lo controlamos bastante bien. Sacrificábamos metros y poder robar para priorizar en Messi. Y cuando le controlamos en esa posición, los Barça-Madrid se igualaron”, afirmó.
Xabi reconoció que que Guardiola hizo mejor al Real Madrid de Jose Mourinho: “El famoso partido del 5-0 en el Camp Nou nos hizo cambiar muchas cosas. En ese momento no estábamos al nivel para competir contra aquel Barça. Pero al año siguiente ya notamos que sí podíamos. Contra el Barça y en general. Pasamos a tener un juego mucho más dominante. A finales de 2011 estábamos pletóricos. Nosotros lo sabíamos: en cuatro jugadas éramos capaces de romper cualquier partido. Era como ir al parque de atracciones”.
Además, no dudo en defender a Karim Benzema, objeto de fuertes críticas por parte de la afición blanca en este momento: “Benzema es mitad delantero, mitad mediapunta. Muchos le critican por eso; yo creo que es su mayor virtud. No le puedes buscar en una sola jugada, sino en muchas y diferentes. En profundidad, en el área, en las bandas y a la espalda del pivote, que es donde se marca la diferencia. Y si construyes el juego así, estás mejor posicionado. Más junto. Y si estás más junto, puedes presionar mejor”.
Sobre su conexión en el Bayern con Guardiola, agradeció al entrenador catalán que lograse alargar su carrera: “En el Bayern, jugábamos 90 minutos en campo contrario. Yo no cubría tantas distancias, guardaba mi posición y hacía esfuerzos medidos. De cara a mis últimos años, eso me vino muy bien. Y aprendí muchísimo. Fue muy enriquecedor”.