Víctor Martínez regresa al campo de entrenamientos de los Tigres de Detroit, confiado en su recuperación, luego de problemas físicos que mermaron su rendimiento en la temporada del 2017.
El pelotero de Ciudad Bolívar, ya con 39 años de edad, está consciente de que sus mejores momentos siguen pasando, pero espera poder ayudar al mánager, Ron Gardenhire, en el movimiento, con miras a sacar a la novena de los malos momentos que ha vivido en las últimas temporadas.
Pueden cambiar las cosas en el 2018, dice el toletero, pero todo va a depender del rendimiento de los veteranos y de lo que puedan aportar las nuevas contrataciones que realizó la organización al finalizar la temporada anterior.
Martínez, en el 2017, finalizó con un débil promedio de .255, con 10 jonrones y 47 carreras impulsadas, numeritos que no ayudaron para nada a colocar al conjunto en una buena posición y a la postre terminó con uno de los peores récords de la campaña.
Jugar en la temporada que se avecina podría ser la última de su carrera, pero eso está por verse. De acuerdo con los numeritos que muestre en la pizarra, y los problemas de salud no afloren, tal vez podría esperar más tiempo para pensar en un retiro.
A los Tigres de Detroit, pocas piezas le funcionaron el año anterior. Una que se considera importante, el bajo rendimiento de Miguel Cabrera, igualmente agobiado por los dolores musculares, así como José Iglesias y Coby Jones.
El trabajo no recae sobre un solo pelotero. Ese desastre de la temporada anterior fue producto del bajo rendimiento del cuerpo de lanzadores y relevistas. Michael Fulmer, Jordan Zimmerman, Mike Fier, no pudieron ser dominantes, y antes, la gerencia del club envió a una de sus figuras, Justin Verlander, a los Astros de Houston, y le fue verdaderamente bien.
Es muy temprano para predecir lo que puedan hacer los peloteros, entendiendo que en el deporte los cambios se producen sobre la marcha. Víctor Martínez se prepara con entusiasmo para lo que viene y solo el tiempo dirá hasta qué punto puede cumplir su tarea como bateador designado de los Tigres de Detroit, urgidos de recuperarse luego de ser últimos en la División Central de la Liga Americana, con solo 64 triunfos, por 98 reveses.
Uno de los factores que pueden ayudar en el rendimiento del pelotero es la confianza en sí mismo, el apoyo que recibe de sus compañeros y que el tratamiento al que se sometió durante el descanso, luego de finalizar la temporada, rinda sus frutos.
Víctor Martínez exhibe números envidiables. Segundo en la votación para el Jugador Más Valioso en el 2014, con promedios interesantes, .335 de average y 32 jonrones, ganando el cuarto título consecutivo de bateo, y en el 2016 reapareció a la ofensiva con 27 jonrones y promedio de .289.
Víctor Martínez regresa con Detroit a su lugar como bateador designado
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