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Venezuela queda a merced del milagro

La guardameta venezolana Franyely Rodríguez terminó desconsolada tras la derrota 3-0 frente a Corea del Sur. (Foto/Fifa.com)
La guardameta venezolana Franyely Rodríguez terminó desconsolada tras la derrota 3-0 frente a Corea del Sur. (Foto/Fifa.com)
Sólo un milagro puede hacer que Venezuela avance a la segunda ronda del Mundial Femenino Sub 20 de Papúa Nueva Guinea, luego de encajar su segunda derrota el hilo, esta vez ante Corea del Sur, que la goleó por 0-3 en el segundo partido del grupo D.
Luego de 75 minutos muy parejos, entretenidos, con ocasiones de fútbol para ambos bandos, fue Corea del Sur el que terminó inclinando la cancha, luego de que Mariana Speckmaier desperdiciara la opción de adelantar a Venezuela, al fallar en el cobro de un tiro penal.
Aquel disparo errado a los 74 minutos terminó convirtiéndose en el punto de quiebre, literal, para las venezolanas, que no superaron la equivocación y en lo emocional lo sufrieron. En ese trance, apenas tres minutos después las coreanas consiguieron su pena máxima y sí que la aprovecharon. Namgung Yeji remató al palo contrario de Franyely Rodríguez y así abría el marcador.
Tras el tanto, Corea se convirtió en un tsunami y arrasó con la debilitada defensa criolla. Al minuto 80, Han Chaerin desbordó por la banda izquierda y remató cruzado, Franyely Rodríguez alcanzó a tocarla y Neyli Carrasquel la punteó a su propio arco en un intento por echarla fuera. El autogol fue una puñalada casi mortal para las criollas.
Kim Seongmi puso el último tanto de la noche en Puerto Moresby, al minuto 90, ese que deja a las criollas a las puertas de una virtual eliminación y es que lo contrario queda muy cuesta arriba.
Su última carta se la jugará el próximo lunes 21 de noviembre frente a México, equipo que cayó frente a Alemania también por 3-0. Con las teutonas como líderes absolutas del grupo D y únicas clasificadas a cuartos de final, la Vinotinto debe apostar por una goleada de más de 3 goles sobre las mexicanas y ligar un resultado igual o más abultado de las escandinavas sobre las coreanas. (MJS)

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