El Mundial de Clubes vivirá el martes un nuevo día de competición, con los dos últimos partidos en Al Ain antes de que el torneo se mude a Abu Dabi: la semifinal de River Plate ante el equipo de la ciudad, el Al Ain FC, y el choque por el quinto puesto entre Chivas y Esperance.
River Plate lleva desde el martes de la pasada semana en Emiratos Árabes Unidos, país al que voló directamente desde Madrid, donde había ganado la Copa Libertadores dos días antes contra Boca Juniors.
Se ha venido ejercitando en plena resaca por el título continental y por fin llegó la hora de jugar su primer partido desde el del Bernabéu.
El rival será un Al Ain FC desconocido para muchos y que ha logrado seis tantos en los dos partidos disputados en la última semana en este Mundial de Clubes, donde empezó ganando al Wellington neozelandés (4-3 en la tanda de penales tras un empate 3-3), antes de arrollar al Esperance tunecino en cuartos de final (3-0).
Argentina nunca ha conseguido ganar el Mundial de Clubes en su formato actual: no lo lograron ni Boca Juniors (2007), ni Estudiantes (2009), ni San Lorenzo (2014), ni el propio River Plate (2015).
Los ‘Millonarios’ se presentan por lo tanto con un desafío de dimensiones históricas, en busca de revivir la gloria que supuso su título en la Copa Intercontinental de 1986 contra el Steaua de Bucarest.
De esa primera semifinal saldrá el primer finalista, que se completará el miércoles con el choque de semifinales entre el Real Madrid español, campeón de los dos últimos Mundiales de Clubes, y el Kashima Antlers japonés.
Antes de la semifinal River-Al Ain se jugará en el mismo estadio Hazza Bin Zayed el choque por el quinto lugar entre las Chivas de Guadalajara mexicanas y el Esperance tunecino, los dos derrotados de cuartos de final.
Chivas, que fueron superados en su primer partido 3-2 por el Kashima, intentará al menos no irse con el deshonor de un sexto puesto, que sería la peor posición para un equipo de su país en la historia del torneo.