El fútbol, deporte universal por excelencia, tiene en el tachirense Pedro Depablos un gran paladín. Pese a contar con apenas 41 años de edad, ya es una especie de trotamundos, con un recorrido bien interesante; primero en condición de jugador, a nivel aficionado, luego como jugador profesional, y en la actualidad en calidad de director técnico.
Por más de tres quinquenios militó en clubes rentados, de Venezuela y el exterior, destacando su paso por el Deportivo Táchira, el Caracas FC, Deportivo Lara y Estudiantes de Mérida entre los más importantes del país; y a nivel internacional vistió los uniformes del Independiente Santa Fe, La Equidad y Condor FC, todos de Colombia, siempre con el número 10 a la espalda, un volante de ingenio, además de exquisito con el balón.
Varias participaciones internacionales: una Copa Merconorte, cuatro Copa Libertadores de América, alcanzando logros importantes en estos eventos defendiendo los colores del Deportivo Táchira y el Caracas FC.
Pedro Depablos también fue integrante de selecciones nacionales, pasando por la Sub 17, preselección Sub 23 y selección de mayores, en Copa América, Copa Kirim y eliminatorias al Mundial de Alemania de 2006, bajo la dirección técnica del médico y entrenador Richard Páez Monzón.
Un estudioso del fútbol
Desde muy joven entendió que el fútbol era su razón de ser; compartía el estudio con un balón, en los ratos libres y los fines de semana iba a la cancha más cercana a pulir sus conocimientos, hasta que él mismo entendió que tenía con que ser un jugador de primer nivel.
Después de recibirse como Bachiller de la República, lejos de continuar sus estudios universitarios, se entregó por completo al fútbol, como jugador activo, y terminado su ciclo como tal, se hizo entrenador, con todos los honores, titulado por la FIFA, la Federación Venezolana de Fútbol y licencia de Conmebol, siempre recibiendo la sabia enseñanza de los mejores.
En grandes capitales del balompié universal conocen la trayectoria del hijo de la “Ciudad Pontálida”, merced de haber hecho pasantías en México DF, Escuelas de Consultores y en Barcelona, España, al lado de Ernesto Valverde.
Objetivo, dirigir en el exterior
Pedro Depablos no se duerme en los laureles, pues si bien es cierto Venezuela es su país de origen, nacido en el Táchira para más señas, su gran objetivo es triunfar fuera de las fronteras patrias, territorio donde ya dio su primer paso, gracias a su trabajo en Montevideo, Uruguay, con el Boston River, divisa que luego de 77 años en la Segunda División, bajo su batuta la subió a la División de honor.
Antes de viajar a suelo uruguayo estuvo laborando como asistente en el Zamora FC de la Primera División y el Deportivo Táchira de la Segunda categoría, enseñanzas que le sirvieron para ir al exterior a recibir más experiencia.
Pudo ser técnico del Deportivo Táchira
Sin conseguir los objetivos que se trazó en el Deportivo La Guaira, si puso de manifiesto todas su sabiduría, por ello la posibilidad cierta que tuvo para sentarse en el banquillo del aurinegro, luego de algunos contactos que hubo con la dirigencia del ocho veces campeón nacional.
Es claro el joven entrenador que nunca ha estado detrás de dirigir equipos en Venezuela, su carta de presentación siempre ha sido “mi trabajo”, trayendo como consecuencia que en el momento que estaba por regresar a Montevideo donde tengo mi familia, fui llamado por el señor Rafael Lacava, presidente del club Academia Puerto Cabello para que fuera su director técnico.
—Me gustó la propuesta, presenté mis credenciales, el reto a cumplir al frente de este club que apenas tiene cinco años de fundado y recientemente ascendido a la Primera División; y en apenas dos meses de trabajo ya se están viendo los frutos, prueba de ello el estar metido entres los ocho que buscan pasar a la liguilla final, sentenció.
En la plática con el periodista, vía telefónica, el técnico no ocultó su satisfacción por dirigir a un club nuevo pero con muchas virtudes de organización y competición gracias a lo que ha venido haciendo su presidente y en la actualidad gobernado del estado Carabobo, Rafael Lacaba, un dirigente deportivo prestado a la política.
El estadio “La Bombonerita”, nombre en homenaje a su homónimo la “Bombonera” de Buenos Aires, sede del Boca Juniors, club del cual es seguidor el mandamás del equipo porteño, es una tacita de oro, ejemplo a seguir en el continente, gracias a todos los servicios con que cuenta, que en honor a la verdad puede considerarse como el primero en el país, señala sin temor a equivocaciones el estratega tachirense al servicio del club de Puerto Cabello.
Sin inmutarse, pero sin con un dejo de postín, sintió gran satisfacción por el triunfo histórico que consiguió su equipo Academia Puerto Cabello en la fecha seis del actual Torneo Clausura, ante el encopetado Caracas FC, el club de mayores pergaminos en Venezuela.
En lo competitivo, la meta que tiene por ahora Depablos es mantener al equipo en la Primera División y clasificar al cuadrangular final; y con miras a esa premisa cuenta con un plantel bien importante, una mezcla de juventud y experiencia, además del elemento importado, destacando el atacante argentino Enzo Maidana (29 años) y el zaguero uruguayo, Ferreira (27 años), ambos con mucho recorrido en el concierto internacional.
—Recibí el equipo en el puesto 15, acota, en la reclasificación, y ahora está en la casilla 11, en apenas cinco fechas, en el Clausura es sexto con 8 puntos- La entrevista fue hecha antes de jugarse la jornada seis- .Me caracterizo por darle oportunidad al jugador joven, la generación de relevo, amén que voy muy bien con el camerino, máxime si yo jugué casi por dos décadas, apostilló.
También habló bondades de su cuerpo técnico, quienes le acompañan en el banquillo, específicamente Ignacio Zugarramundi (uruguayo), primer asistente; Miguel Acero, preparador físico; Marlon Ruiz y Carlos Depablos, asistentes y Félix Golindando, preparador de arqueros.
En el plano profesional su meta es dirigir en el exterior, y para eso “me estoy preparando”, esgrime. Y en lo personal “amo a mi familia, mi madre, mis hermanos, mi hijo Sebastián de 11 años, quien milita en las categorías menores del Sporting de Lisboa, en la ciudad de Elvas, Portugal.
Mención aparte su hermana Carla Jacobo, “ mi alfa y omega, me mueve el piso, es algo especial, quien está pendiente de mi las 24 horas, la quiero como si fuera mi hija”, remata Pedro Depablos, el sencillo y humilde hombre de pueblo, pero un gran profesional desde el banquillo.
Homero Duarte Corona