El diario Argentino Olé en su edición digital le dedicó un artículo al venezolano Jan Hurtado, quien este jueves se inició como goleador de Gimnasia y Esgrima de La Plata siendo verdugo de Boca Juniors. El diario Argentino resalta que Jan Hurtado ganaba 40 pesos argentinos por mes en Táchira y recibió una dura sanción por no querer renovar su contrato. Hace dos semanas fue habilitado para jugar en Gimnasia y en su segundo partido elimina a Boca.
Jan Hurtado vivió una noche de gloria en Córdoba. Se agarró la cabeza al final del partido. No lo podía creer. El, quien hace poco menos de un mes no sabía si iba a poder jugar en Gimnasia, resultó el verdugo de Boca. Ingresó en el segundo tiempo en lugar de Guevgeozián, y capitalizó un desborde desde la izquierda para vencer la resistencia de Rossi y poner al Lobo en los cuartos de final de la Copa Argentina.
“Todas las gracias a Dios. Muy contento… Fue un buen trabajo, la cancha estaba muy mojada y pude meter un gol. Muy feliz, se lo dedico a mi papá, mi mamá, mi novia que me apoyaron este año sin jugar. Siempre tuve los pies en la tierra, sigo mentalizado en lo que viene”, dijo el atacante, de 18 años.
Pensar que el Lobo lo había presentado el 6 de agosto y recién hace dos semanas lo pudo habilitar.
Crisis que obliga a salir de Venezuela
Así lo reseña Olé:
Es que detrás de él hay una historia. La profunda crisis que sufre Venezuela bajo el gobierno de Nicolás Maduro, con inflación cercana al millón por ciento anual, hambre, escasez y represión, obligó a cientos de miles de personas a tener que abandonar ese país para encontrar un mejor futuro en otro lugar. Y esta ola migratoria que afecta a varios países de la región ya rompió un récord en Argentina: en los últimos tres años llegaron más de 70.000 y en los primeros seis meses de 2018 los venezolanos que se radicaron en nuestro país forman el 25% del total de los inmigrantes sentencia el magazine deportivo.
Algunos de los que llegaron son médicos o ingenieros que buscan insertarse en el mercado laboral. Y como el fútbol también es parte de la sociedad, en la Superliga hay un claro ejemplo de esta problemática, el atacante del Lobo. Jan Carlos Hurtado había debutado ante Patronato, hace dos semanas, el Lobo ganó 2-0 en Paraná.
Para llegar a este buen presente, la tuvo que pelear. Hurtado nació el 5 de mayo del 2000 en El Cantón, Barinas, y con sólo 18 años ya jugó el último Mundial Sub 20 de Corea del Sur, al mando de Rafael Dudamel, donde la Vinotinto fue subcampeón y Jan metió un gol en cinco partidos. Sin embargo, más allá de que es una de las grandes promesas de su país, en el Deportivo Táchira no la pasó bien. Hace un año atrás, no quiso renovar su contrato y el club acusó a Nelson, su padre, de querer sacarlo del país siendo menor de edad. Ante esta situación, el Consejo de Honor de la Federación Venezolana tomó cartas en el asunto, declaró culpable a Jan y le aplicó una sanción de seis meses que expiró hace pocos días.
Luego de esto, el joven se declaró en condición de libre y dio sus motivos: “Ya cumplí la pena que me pusieron. Dicen que me siguen pagando el sueldo, pero en ese entonces me pagaban 40 dólares. Ahora me deben estar pagando un dólar”. Sí, ganaba 40 pesos argentinos por mes… Después de algunas diferencias económicas con el Brujas de Bélgica, donde estuvo a prueba con el aval de Táchira, Hurtado decidió irse al Lobo y firmó un contrato por tres años con el equipo platense. Si bien su ex club sigue insistiendo que el jugador tenía contrato hasta fin de este año, la Federación Venezolana le dio el visto bueno para que juegue en Argentina.