Luka Doncic no tuvo su mejor noche en un nuevo enfrentamiento ante su ídolo LeBron James. El esloveno tuvo una primera parte para el olvido (-22 en la valoración más/menos) y terminó pagando su frustración después de un tiro libre fallado. El ex del Real Madrid erró desde el 4,60 y se rompió la camiseta mientras bajaba a defender, dejando una de las imágenes del curso en la NBA.
Tras fallar cinco tiros libres, el base se rasgó su camiseta, mientras el cuatro veces MVP sumó 35 puntos y 16 rebotes.
La escena llegó en directo a cada rincón de Estados Unidos por la televisión nacional. A falta de un minuto para el final del primer cuarto, con su equipo 19 puntos abajo, Luka Doncic rasgó el cuello de su camiseta, abrasado por la frustración. “Jugué muy mal. Me sentía como si no supiese de baloncesto. No era yo. Tengo que mejorar. Y mucho”, admitió el base de los Mavericks. Sus 25 puntos, 10 rebotes y siete asistencias de nada sirvieron ante el despliegue de unos Lakers guiados por un descomunal LeBron James (114-129).
El Rey sumó 35 puntos y 16 rebotes en Dallas para la séptima victoria consecutiva de su equipo, la mejor racha del curso. “No se trata de saber cuántos partidos seguidos podemos ganar, sino de mejorar cada noche y sé que hoy lo hicimos”, analizó el cuatro veces MVP. Su absoluto dominio de la situación se fraguó desde el inicio, al anotar o asistir en las nueve primeras canastas de su equipo, que cerró el primer cuarto con una ventaja de 22 puntos.
Por entonces, Doncic había errado sus cinco primeros tiros libres y los Mavericks no sabían cómo aprovechar la ausencia de última hora de Anthony Davis, con dolores en la espalda tras su dura caída del martes ante los Knicks. La responsabilidad bajo los aros fue asumida por Kyle Kuzma (26 puntos, seis rebotes), bien secundado por Javale McGee y Dwight Howard, que no fallaron ninguno de sus ocho lanzamientos.
Los 79 puntos encajados al descanso dejaban en evidencia el plan defensivo de Rick Carlisle, cuya ira fue acrecentándose según avanzaba la noche. En el último cuarto, tras su segunda técnica, fue expulsado por los árbitros y Stephen Silas debió asumir la dirección en un American Airlines Center con muchos asientos ya vacíos.
Olvidado ya el incidente, Carlisle se centró en proteger a Doncic. “Tiene 20 años. A esa misma edad yo acababa de matricularme en la Univesidad de Maine. Y no sabía ni dar cuerda a mi reloj de pulsera”, refrendó el técnico. “Algunas veces, sus rivales se toman ciertas licencias defensivas contra él. Sigue aprendiendo a lidiar con todo eso, pero no es sencillo”, finalizó tras el cuarto y último duelo del curso ante los Lakers, claros dominadores (3-1).
Sin embargo, desde la victoria en el Staples Center del 1 de diciembre, los texanos han caído en nueve de sus 19 siguientes partidos, mientras los líderes del Oeste acumularon 14 victorias en 18 jornadas. Este noche, los angelinos visitan Oklahoma, mientras los Mavs reciben a Philadelphia.
Luka nearly ripped his jersey in half, then kept playing 😅 pic.twitter.com/HcooSDmM6q
— SportsCenter (@SportsCenter) January 11, 2020