Madrid, jun (EFE).- La selección de Islandia avergonzó a la de Portugal, ante la que logró un empate histórico (1-1) en su primera comparecencia en un gran torneo, en el que, además, marcó su primer tanto; y Hungría venció el clásico europeo ante Austria (0-2) en la quinta jornada de la Eurocopa de Francia.
La gesta de Islandia, un país de unos 323.000 habitantes, quedará para los anales y supone la primera gran sorpresa de la Eurocopa, que ha cerrado este martes el debut de los 24 equipos participantes en la competición.
El estadio de Saint Etienne fue testigo del mal partido de Portugal, impotente en todo momento ante el empuje y el corazón de los islandeses. Y también del bajo rendimiento de Cristiano Ronaldo, desaparecido la mayor parte del duelo.
Todo, a pesar de que Luis Carlos Almeida “Nani” adelantó a los lusos en el minuto 31. El tanto parecía encarrilar una victoria pronosticada por la mayoría para los entrenados por Fernando Santos, pero nada más lejos de la realidad.
Islandia siguió tirando de garra y, arropado por una hinchada fiel desde la grada, consiguió el tanto soñado al poco de salir al verde desde la bocana de la caseta para jugar la segunda mitad. En el minuto 50, Birkir Bjarnasson, que milita en el Basilea suizo, hizo estallar de alegría al pequeño país del noroeste de Europa al firmar el gol del empate (1-1).
En Burdeos, Hungría venció a Austria en el clásico europeo (2-0), un encuentro que vivió su edición número 137 y en el que, además, el cancerbero magiar, Gabor Király, batió el récord de edad de la historia de la Eurocopa al jugar a una edad de 40 años y 75 días.
Los tantos de Adam Szalai (minuto 62), delantero del Hannover 96 de Alemania y que militó en el filial del Real Madrid entre 2007 y 2010, y el de Zoltan Stieber (minuto 87), voltearon el duelo a favor de Hungría, que hasta el tanto de Szalai estaba siendo superada por Austria.