SOCHI, Rusia, 12 Jun 2018 (AFP) – Brasil está contento. En su primer entrenamiento en el intenso verano de Sochi, la Seleçao se dio un baño de masas ante la hinchada rusa, los titulares contra Austria completaron su recuperación y varios jugadores acabaron rociados de harina celebrando su cumpleaños entre risas y batucadas.
A pocos metros del mar y con un sol brillante que ronda los 30 grados en Sochi, la ‘canarinha’ parece que está en casa. En día de feriado nacional, los aficionados locales se volcaron con la visita de la pentacampeona del mundo, y unas 4.000 personas aguardaban a los jugadores en el estadio situado cerca del lujoso hotel de la Seleçao en esta ciudad del sur de Rusia.
Varios centenares más veían el entrenamiento desde un puente cercano, aunque el ambiente lo pusieron los hinchas brasileños desplazados para el Mundial, que vestidos con la ‘amarelinha’ y sin dejar de cantar a sus ídolos hasta lanzaron una batucada.
Minutos antes de las 10H00 locales, Tite aguardaba concentrado en el campo a sus jugadores, que volvían a entrenar después de la contundente victoria el domingo en Viena (3-0).
La mayores atenciones volvieron a ser para Neymar, que entró el último en el campo, con los pantalones muy arremangados para el sol y el mismo buen humor que ha demostrado desde su llegada a Rusia. Aunque tuvo que compartir las canciones de los hinchas con Marcelo, otro de los nombres más coreados por los aficionados, en su mayoría niños.
Tan esperado era el delantero del PSG, que un joven llegó a saltar descalzo al césped para tratar de acercarse a él durante la práctica, pero fue interceptado por la seguridad.
Después del distendido rondo inicial, los futbolistas se dividieron en dos grupos entre los que todo apunta a que pueden ser los titulares en el estreno del domingo ante Suiza y los suplentes.
Este equipo formado por Alisson -que practicaba con el resto de porteros comandados por el campeón del mundo en 1994 y ahora preparador Claudio Taffarel-, Danilo, Miranda, Thiago Silva, Marcelo, Casemiro, Paulinho, Willian, Philippe Coutinho, Neymar y Gabriel Jesús fue también el que arrancó contra Austria el domingo en Viena.
Juntos realizaron ejercicios suaves y de toque, mientras la actividad más intensa correspondió al grupo de los suplentes, seguidos muy de cerca por un reflexivo Tite, que trabajaron la presión y salida de balón, así como algunas acciones de juego.
El único que no se entrenó con el resto del grupo fue el nuevo fichaje del Manchester United Fred, que se recupera de un golpe en el tobillo.
Se acabó la broma
Prácticamente recuperado de la lesión en el pie que le tuvo tres meses de baja, Neymar volvió a mostrarse muy activo e incluso dejó evidencias de su buena forma al darse una gran carrera huyendo de un intento de huevazo de Thiago Silva al final de la hora y media de entrenamiento.
Fue entonces cuando Philippe Coutinho, que cumple hoy 26 años, acabó rociado de harina y huevos para celebrar su aniversario, igual que Fagner, que no escapó de esta tradición brasileña pese a que el suyo fue el lunes.
Aunque Neymar cumple años en febrero, también se llevó finalmente un huevazo por haber sido uno de los más activos en el juego.
Pero no todo van a ser risas para Brasil. Cumplido el compromiso con la FIFA, que obliga a realizar algunos entrenamientos abiertos para implicar a la hinchada local, la Seleçao se entrenará los próximos días a puerta cerrada en otro campo contiguo, donde la Confederación Brasileña (CBF) trabaja en un dispositivo para evitar filtraciones.
Una de las grandes favoritas para levantar la Copa en Rusia, la ‘canarinha’ estará en Sochi hasta el viernes, cuando abandonará por primera vez su campo base para viajar hasta Rostov del Don, donde debutará el domingo ante Suiza.
Encuadrada en el Grupo E, la Seleçao se verá después contra Costa Rica el 22 de junio en San Petersburgo y frente a Serbia, el 27 en Moscú.