Con un amplio dominio, el Deportivo Lara se tituló ayer campeón del Torneo Clausura 2017 del Fútbol Profesional Venezolano, luego de imponerse 4-3 a través de la tanda de penales ante su similar de Mineros de Guayana, en el estadio Metropolitano de Cabudare, ganándose el derecho ahora de ir por la estrella ante el Monagas SC, monarca del Apertura 2017.
Los crepusculares cerraron con broche de oro una gran temporada, haciendo caso al adagio que reza “lo que bien inicia, bien culmina”, puesto que desde las primeras de cambio no dejaron de formar parte de los punteros del todo contra todos; de hecho, llegaron a los Octavos de Final del certamen como líderes de la fase anterior y de allí en adelante no bajaron la guardia y continuaron vapuleando a cuanto rival se les cruzó por el frente.
Tromba crepuscular
En términos generales, se pudo deducir que Lara fue superior a Mineros en esta vuelta de la final. Cobijados por su hinchada y en su propio estadio, los rojinegros salieron mentalizados en un solo objetivo: emparejar la serie, pues en la ida habían caído por la mínima diferencia, disputada el domingo en el estadio CTE Cachamay de Puerto Ordaz, por lo que les urgía conseguir la paridad para poder soñar con alzar la copa.
José Miguel Reyes y José Caraballo fueron una gran molestia para la defensiva minera. Pasaron 15 minutos y Lara seguía golpeando a la visita, que como podía se defendía y resistía.
No obstante, a los 18 minutos de la primera parte, el exaurinegro Jesús “Patoncito” González consiguió marcar el 1×0 que igualaba la serie, gracias al desborde de Reyes -otro que militó en Táchira- por la banda izquierda, quien tras “bicicletear” a su marcador centró el esférico a las inmediaciones del área rival, encontrando a Patoncito, quien solo puso su pierna derecha para cambiarle la trayectoria al balón y dejar desubicado al portero Mario Santilli. La algarabía reventó en el Metropolitano, pero aún quedaba tiempo y tarea por hacer.
Lara siguió con su ritmo de juego y no cedió espacios. Los guayaneses aparecieron solo cuando faltaban 5 minutos para el final de la primera etapa, pero su ataque no pasó a mayores; el guardameta local, Carlos Salazar, aún no comenzaba a figurar.
La segunda parte también tuvo el sello crepuscular, es decir, más de lo mismo que se vio en el inicio: un Deportivo Lara atacando incesantemente y acorralando a su contrincante. A raíz de ello, Juan Domingo Tolizano, técnico minerista, hizo ingresar al experimentado mediocampista panameño Rolando Escobar, a fin de poder controlar el esférico y tener un mayor orden de ideas en su equipo, cambio que obtuvo una leve mejoría.
Mineros tuvo su oportunidad a falta de tres minutos para terminar el complementario, pero Salazar se vistió de héroe y salvó su valla en par de oportunidades. Así llegaron a los penaltis.
Arqueros, las figuras
Con el 1 a 1 en el global, el trofeo se peleó en la tanda de penaltis, en la cual los guardametas, Santilli y Salazar, se llevaron toda la atención con sus grandes y oportunas atajadas. Giacomo Di Giorgi tuvo el quinto penal larense para dar el título a los suyos de manera anticipada, pero Santilli le adivinó y se fueron a una ronda más, en donde su capitán, Henri Pernía, marcó y dio el título a los suyos.
Por Mineros marcaron: Escobar (2), Ángel Faría (4) y Charlis Ortiz (5); fallaron Richard Blanco (1), Francisco Pol (3) y Edson Castillo (6). En cambio, en Lara anotaron Carlos Sierra (1), Patoncito (2), Bernardo Manzano (4) y Henri Pernía (6); erraron Lucas Gómez (3) y Di Giorgi (5).
Ahora la estrella
Todo el país siguió de cerca esta final, en especial en la ciudad de Maturín, sede del Monagas SC, campeón del Apertura y quien ahora ya conoce el nombre del rival a enfrentar por la estrella de la temporada, la cual iniciará este miércoles, a las 7 de la noche, en el estadio Metropolitano de Cabudare, dejando la ida para el domingo 17 de diciembre, en el Monumental de Maturín.
Favio Hernández