Generación de relevo pide pista

Venezuela está convertida en potencia sudamericana a nivel de las categorías Sub-17 y Sub-20, reflejado en los hechos, la clasificación a competencias mundialistas, primero a Egipto-2009 y luego Emiratos Árabes-2013.
No ha sido producto de la casualidad, ni mucho menos, sino en base a un trabajo largo y con mucha seriedad, donde la Federación Venezolana de Fútbol ha jugado un papel preponderante, independientemente los problemas que se ventilen a nivel de la dirigencia y que son bien conocidos en el contexto internacional.
La obligatoriedad de alinear un jugador juvenil a los equipos profesionales de la Primera División en cada compromiso de los torneos regulares, nacidos entre los años 1997 y 2000, y en la Copa Venezuela, solo los años 1997 y 1998, a la postre ha sido la clave para que poco a poco se hayan venido dando estos frutos.
Buena parte de los jugadores que vistieron la casaca vinotinto en la justa universal de Egipto militan en clubes profesionales de Venezuela y el exterior, y en la misma onda algunos de los chicos que asistieron a los Emiratos Árabes.
Ocho años después de participar en la justa egipcia, vuelven los chicos de la Sub-20, esta vez una nueva camada, y logran conseguir el boleto para participar en el Mundial de Corea del Sur, entre el 20 de mayo y 11 de junio de 2017, después de clasificar en el Sudamericano de Ecuador, celebrado recientemente.
Y para no quedarse atrás, los jovencitos de la categoría Sub-17 quieren emular lo hecho por sus colegas de la Sub-20, al conseguir el pase al hexagonal del torneo sudamericano que se disputa en territorio chileno.
En su primera presentación de esta ronda, de la que saldrán cuatro equipos para el Mundial de la India, en octubre de este año, Venezuela cayó por la mínima diferencia ante el anfitrión Chile, que lo obliga a recuperarse este viernes, cuando se mida a Brasil, selección que en el juego de cierre del martes en la noche igualó a dos goles con Paraguay.
Los propios paraguayos, así como colombianos y ecuatorianos, serán los otros antagonistas a los que se tendrán que enfrentar Nerio Hernández y sus jugadores en su objetivo de conseguir uno de los cuatro cupos para volver a un campeonato mundial, tal como lo alcanzó Venezuela en el 2013.
Los Sub-17 y Sub-20 piden pista
El director técnico Rafael Dudamel, quien tiene a su cargo la dirección técnica de la selección de mayores y la supervisión de las categorías de menor rango, debe estar ojo avizor con estos muchachos, tienen capacidad y calidad para ser tomados en cuenta en cualquiera de los partidos de alistamiento de la selección de mayores, incluso en alguno de los juegos oficiales de la eliminatoria a Rusia-2018, considerando que Venezuela ya quedó al margen del magno evento del balompié universal.
Nombres y hombres en una y otra selección, tanto en la Sub-17 como la Sub-20, fiel reflejo de ello que un gran porcentaje de estos jugadores ya militan en clubes de Primera División en Venezuela y otros en el exterior.
Jhan Hurtado, un jovencito de apenas 17 años, ficha del Deportivo Táchira, ya tiene en su espaldas no solo varios partidos en la división de honor, también jugó un par de compromisos en Copa Libertadores de América, el año pasado.
Faustino Asprilla, uno de los grandes jugadores colombianos de hace un poco más de diez años, se sobró en loas para con el moreno atacante; a través del programa de fútbol en una cadena de televisión internacional le deseó la mejor suerte del mundo, señal inequívoca que se está en presencia de un elemento con calidad de exportación.
Al nombre de Jhan Hurtado se suman otros, a nivel de todos los sectores del campo de juego, que ponen de manifiesto los grandes progresos del fútbol venezolano en las categorías Sub-17 y Sub-20. (Homero Duarte Corona)