El Deportivo Táchira, en una suerte de encanto en carretera. Fuera de su fortín no cree en nadie, prácticamente una campaña de récord dentro de su historial, respaldado en hechos, luego de sumar 14 puntos de 18 posibles, producto de 4 triunfos y 2 empates.
Superior la cosecha de puntos alcanzados fuera de su reducto, pues en el “Templo del fútbol” ha logrado 11 unidades de 15 posibles, producto de tres victorias y dos divisiones de honores.
La última víctima, Estudiantes de Mérida, un lapidario 1-4 alcanzado ayer al mediodía en el estadio “Metropolitano” de la capital emeritense, triunfo que catapulta al aurinegro como nuevo líder del Torneo Apertura, temporada 2017 del fútbol rentado venezolano, con un total de 25 unidades, bajando del pedestal al Zamora FC, que se queda con 24, y con 2 partidos más que el ocho veces campeón nacional.
Una falta de Rosmel Villanueva a Pedro Ramírez dentro del área para el castigo de una pena máxima que la transformó en gol el ariete paraguayo, para el 0-1 a favor del visitante, mientras que Edgar Pérez Greco, en un pepino de antología desde 20 metros aumentó la cuenta para el amarillo y negro.
El propio Rosmel Villanueva se reivindicó ante su afición para descontar en el marcador, el 1-2 a los 43 minutos, ante fallo del arquero José David Contreras, quien salió mal de su pórtico en el cobro de un tiro de esquina, que aprovechó el lateral para empujar el balón con un claro cabezazo, de acuerdo al informe de la estación Imaginación 96.1 FM.
Para el complemento, de entrada, los directores técnicos hicieron un cambio cada uno; el anfitrión Nabor Gavidia sacó a Omar Labrador y le dio paso Luis Rodríguez, y Santiago Escobar hizo lo mismo con Edwin Quero e ingresó a Daniel Benítez. Once minutos más tarde el tachirense Jefferson Velazco, al servicio del equipo local, fue relevado por Nicolás Villafañe.
El “guaraní” Víctor Aquino hizo el doblete para su causa, a los 63 minutos, en jugada individual, después de una habilitación perfecta de Edgar Pérez Greco, puso el 1-3 del encuentro y su diana número 10 del campeonato.
“El Sachi” Escobar extractó del juego a Edgar Pérez Greco, de gran figuración en el cotejo, a los 70 minutos, para darle cabida a Jorge “Zurdo” Rojas, y a los 78 Víctor Aquino fue sustituido por “Patoncito” González.
Con un fútbol pragmático, sin alardeos de sobrado, respaldado por el marcador a su favor, el visitante esperaba y contraatacaba al local, obteniendo como premio el 1-4 definitivo en la humanidad de Samuel Sosa, quien una vez más sacó a relucir todo el talento que lleva intrínseco, para irse en solitario en busca del arco contrario, sacó del paso al meta local y envió el balón al fondo de la red.
Al buen trabajo de jugadores y cuerpo técnico después de cumplida la decimoprimera jornada, se suma el invicto que mantiene el equipo, único de los 18 conjuntos del torneo doméstico que no conoce la derrota; sin duda un gran aliciente para los propios protagonistas y aficionados aurinegros.
Es verdad que para ingresar en el selecto grupo de los 8 que irán al cuadrangular final para optar por el título no se necesita terminar de primero o de último; sin embargo, la importancia radica en que de cara a lo que será la lucha por el galardón ya el aurinegro conoce muy bien a los rivales que tendrá al frente.
Restan seis partidos para concluir la ronda eliminatoria, de los cuales tres serán de local y tres de visitante, frente a rivales nada cómodos, cinco de ellos antagonistas directos, que están detrás de la clasificación para el cuadrangular.
En los hechos, el aurinegro recibirá el próximo domingo al Caracas FC en Pueblo Nuevo, luego visitará al Deportivo Anzoátegui, seguidamente será anfitrión del Zamora, después se verá las caras con el Metropolitanos en la capital del país, en la penúltima fecha recibe al Mineros de Guayana y cierra con el Zulia FC en Maracaibo.
(Homero Duarte Corona)