El futbolista del Ajax de Holanda Abdelhak Nouri, quien permanecía en coma desde el 8 de julio del año pasado tras desvanecerse durante un partido amistoso de pretemporada, recobró el conocimiento según informó su familia.
“Su situación neuronal es mucho mejor que hace unos meses. Sin embargo su cuerpo ha ido empeorando porque no se mueve. Está postrado en una cama la mayoría del tiempo y no puede mover el cuerpo por sí mismo, solo su cabeza”, explicó Abderrahim Nouri, hermano mayor de Abdelhak, en una entrevista con el periódico holandés NOS.
“Al principio fue muy difícil, con muchos altibajos. Ahora a veces sale de la cama para sentarse en su silla de ruedas, pero su sistema inmunitario está debilitado, fluctúa mucho. No quiero entrar en detalles, pero la pasó muy mal. Fueron tiempos muy difíciles”, añadió el hermano.
Abderrahim Nouri contó que desde que Abdelhak recobró el conocimiento, él y su familia (su padre y su otro hermano, ambos llamados Mohammed) desarrollaron un sistema de comunicación en base a pequeños gestos como movimientos con la boca o las cejas para interactuar con el futbolista.
El jugador de 21 años había entrado en coma inducido el 8 de julio del año pasado tras ser ingresado a un hospital en Innsbruck (Austria), tras desvanecerse como consecuencia de un ataque cardíaco durante el amistoso que estaban disputando Ajax y Werder Bremen en la pequeña localidad de Hippach.
Cuando se jugaban 27 minutos del segundo tiempo, el futbolista se recostó sobre el césped y ya no reaccionó. El árbitro detuvo el encuentro y una ambulancia ingresó al campo para asistir al futbolista. Allí le practicaron reanimación cardiopulmonar. Después, un helicóptero lo trasladó al centro de salud con pronóstico grave.
Pocos días después los neurólogos detectaron que el futbolista había sufrido daños irreversibles en el cerebro y que las posibilidades de recuperarse eran “nulas”. Los médicos del hospital de Innsbruck atribuyeron el daño a la falta de oxígeno durante un largo periodo.
La familia responsabilizó a Ajax por las deficiencias en la atención de Nouri y el club, que inicialmente había defendido su accionar, terminó admitiendo en junio su culpabilidad en el hecho.
“El tratamiento de Abdelhak Nouri sobre el campo fue insuficiente”, admitió el director del club, el exarquero Edwin van der Sar, quien exhibió un informe que mostraba que los médicos del equipo no se habían concentrado los suficiente en evaluar el ataque cardíaco, la circulación y la posible reanimación del jugador.
“Quiero presentar mis disculpas a la familia de Nouri por haber tardado tanto en cambiar nuestra posición”, dijo Van der Sar.
Pese a este contrapunto, la familia del jugador prefiere no profundizar las diferencias. “He dicho desde el principio que debemos, a pesar de cualquier disputa, mantener una relación normal”, afirmó Mohammed, el padre, quien contó que varias personas vinculadas al club visitan regularmente a su hijo.
Nacido el 2 de abril de 1997 e hijo de padres marroquíes, Nouri era una de las mayores promesas del fútbol holandés. Brilló en las categorías sub-17, sub-19 y sub-21 de su país y debutó en la Primera de Ajax en septiembre de 2016, tras ser elegido el mejor jugador de la Segunda División cuando vestía la casaca de Jong Ajax, el equipo filial.