La selección de Egipto ya puso en marcha su ilusión mundialista. El equipo dirigido por el argentino Héctor Cúper aterrizó en Rusia e inmediatamente comenzó su preparación de cara al debut en la Copa, que será el viernes ante Uruguay.
El avión que llevó al conjunto africano hasta tierras rusas llegó ondeando la bandera del país desde la cabina. Una vez que la nave detuvo su marcha, el entrenador, rodeado por sus asistentes, fue uno de los primeros en descender. Luego fue el turno de los futbolistas y el que se llevó todos los flashes fue Mohamed Salah, la gran estrella del equipo.
Todas las expectativas están puestas en la recuperación del delantero del Liverpool, quesufrió una lesión en el hombro hace solo dos semanas en la final de la Champions League que su equipo disputó ante Real Madrid, y en saber si podrá estar presente en el partido ante “Los Charrúas”.
El primer entrenamiento en la concentración de Grozny no ha dejado buenas señales ya que Salah no participó. El futbolista se quedó a un costado junto a los asistentes de Cúper y vio la práctica de sus compañeros. Como habían anticipado los médicos del plantel, es probable que el goleador de la Premier League no juegue la primera fecha y así complete las tres semanas de recuperación indicadas para su lesión.
“(El Mundial) es un acontecimiento que todo entrenador, nación y país desean. Estamos felices y esperamos hacer un buen papel“, se ilusionó Cúper al llegar a Rusia.
El entrenador argentino de 62 años habló también de lo que le espera a su equipo: “Tenemos expectativas y nos hemos preparado para hacer un buen Mundial. Hay mucho entusiasmo y mucha felicidad en Egipto por esta clasificación e intentaremos no defraudar”.