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Colombo dictó cátedra en Colombia

Jesús Enrique Colombo salió a hombros en la plaza “La Macarena” de Medellín, para dejar constancia que es uno de los grandes novilleros del concierto continental. (Foto/La Nación)
Jesús Enrique Colombo salió a hombros en la plaza “La Macarena” de Medellín, para dejar constancia que es uno de los grandes novilleros del concierto continental. (Foto/La Nación)
Jesús Enrique Colombo dictó cátedra en las plazas de Colombia. Cerró con broche de oro su actuación en los principales cosos neogranadinos, merced del resonante triunfo en la “Macarena” de Medellín, el sábado 4 de febrero, con el corte de cuatro orejas y el indulto de su segundo toro.
Se sobró en loas hacia el hijo de Táriba, la exigente crítica neogranadina, en cada presentación dejó plasmado el sello de calidad con la capa y la muleta, sin dejar de un lado su buena labor con los garapullos.
El diestro taribense comenzó su andar en suelo colombiano en noviembre, marco de la feria de Cali, plaza de Cañaveralejo, luego fue a Manizales, después Tuta (Boyacá), seguidamente Aguazul (Casanare), Málaga (Norte de Santander) y concluyó en Medellín, en cada presentación resonantes éxitos, obteniendo los trofeos.
Sin embargo, mención aparte lo realizado en la plaza de la capital antioqueña, deslumbró el novillero tachirense en la labor muleteril con los dos astados que le tocaron en suerte, especialmente el segundo, “Caminante”, marcado con el número 2, de 403 kilos de peso y perteneciente a la ganadería El Manzanal, al que le ligó una faena de apoteosis.
Pasó eximido Jesús Enrique Colombo su actuación en territorio colombiano, en cada una de las seis plazas donde actuó dejó marcado todo lo que lleva intrínseco como excelente novillero, un gran ambiente, con la seguridad que repetirá este año.
Al día siguiente de su actuación en La Macarena de Medellín, viajó a suelo español, donde ya comenzó su tercera temporada de novillero con caballos, superar con creces lo hecho en las dos campañas anteriores, siempre cargado de trofeos: orejas, indultos y salida a hombros por la puerta grande.
Se avizora la alternativa
Jesús Colombo, padre del Jesús Enrique, no descarta la posibilidad que su retoño reciba el doctorado este año, y se convierta en matador de toros en suelo ibérico, en el mes de septiembre, esto de acuerdo a los planes del apoderado del hijo de la “Perla del Torbes”, Juan Ruiz Palomares.
Los éxitos alcanzados en las dos temporadas, en 2015 y 2016, aunado a lo hecho en territorio americano a finales del año pasado y comienzos de 2017, no cabe la menor duda que Jesús Enrique Colombo está cuajado en su labor de novillero, listo para ser uno de los nuevos matadores de toros nacidos en territorio tachirense.
(Homero Duarte Corona)

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