El Inter de Milán publicó un comunicado en la mañana de este miércoles donde notificaba que el jugador argentibo Mauro Icardi no será más el capitán del equipo y que la responsabilidad recaerá en el meta esloveno Samir Handanovic. La polémica decisión sucede con el trasfondo de la renovación del delantero argentino y las discrepancias con su representante y mujer Wanda Nara.
Il Club comunica che il nuovo capitano della squadra è Samir #Handanovic#FCIM
— Inter (@Inter) February 13, 2019
Icardi dejó de ser el niño mimado del club donde Javier Zanetti es vicepresidente y la capitanía fue entregada al arquero esloveno Samir Handanovic, que juega en el club lombardo desde 2012, un año antes del arribo del argentino. Según trascendió en los medios italianos, el rosarino no renovará contrato con la entidad y aceptará otras ofertas.
A pesar de esta situación, el director deportivo de la institución italiana, Giuseppe Marotta intentó poner paños fríos a la situación que viven con el goleador: “No hay un ‘caso Icardi’. Son situaciones que intentaremos manejar de la mejor manera para el interés de todas las partes. Tanto el técnico como yo queremos lo mejor para el Inter”, explicó hace unos días en declaraciones a La Gazzetta dello Sport.
El entrenador Luciano Spalletti dejó afuera a Icardi de la convocatoria para la Europa League para el partido del jueves contra Rapid Viena.
Esta decisión también llega después de las palabras de Wanda Nara, su mujer y agente, cuando reclamaba más protección para su marido y cliente: “Salen tantas tonterías alrededor de Mauro, por ejemplo, una multa inexistente. Me gustaría que Mauro estuviese más protegido por el equipo. No se entiende si estas cosas malas vienen de dentro o de fuera”, dijo Nara en referencia al trato del equipo para con el delantero.
Quién es Handanovic
Samir Handanovic, de 34 años es un arquero esloveno que juega en Inter desde 2012, antes de la llegada de Icardi al club lombardo. En 2004 el Udinese compró a Handanovic en su período como juvenil. Provenía de NK Domzale, club esloveno, y desde entonces vivió ligado al club de Údine.
En 2006 pasó a préstamo al Lazio por una temporada, pero al no tener continuidad, regresó a Údine. En 2007 llegó al Rimini de la tercera división en calidad de préstamo. Sin mucha participación, regresó al Udinese en donde poco a poco se ganó un lugar en el arco.
En 2012, el club neroazzurro se interesó por los servicios del delantero y decidió pagar una suma millonaria -15.000.000 euros- para tenerlo en el plantel.