Hasta una decena de cracks del Chelsea habrían solicitado a sus representantes que les encuentren una salido en verano, con el equipo londinense eliminado de la Champions League y el club en plena convulsión institucional, según publica el ‘Evening Standard’ inglés. La eliminación en la Champions League esta semana habría acelerado la decisión de muchos de tomar otro rumbo.
Y es que, de aquí a final de temporada, el equipo blue ya no se juega absolutamente nada: la clasificación para Europa la próxima campaña es una auténtica quimera, así que la temporada venidera será solo ‘local’. Como ya se dijo días atrás, algunos de los jugadores sufrirán recortes salariales de más del 30% por esta ausencia en la Champions el año próximo y un grupo considerable de jugadores ha dado instrucciones a sus agentes para que les busquen equipo.
El temor en el Chelsea es que decidan marcharse a los equipos rivales: City, Arsenal, Liverpool, United… Los jugadores estarían molestos por dos razones, según el citado medio: los cambios en el departamento médico en medio de una serie de problemas de lesiones y un equipo excesivamente largo de 32 jugadores que consideran que no ha sido beneficioso. Tampoco gustó que Todd Boehly, propietario del club, calificara de «vergonzosa» la derrota ante el Brighton.
Así pues, la directiva se enfrenta a unos meses complicados en los que tratará de colocar jugadores como Loftus-Cheek, Gallagher, Aubameyang, Koulibaly, Ziyech, Pulisic y Edouard Mendy, mientras trata de convencer a otros de que sigan, como Havertz o Kanté. A Mason Mount no piensan regalarle. Pese a que acaba contrato en junio de 2024, le han puesto un precio de 70 millones.