El pasado 25 de noviembre, la Dimayor desafilió al Cúcuta Deportivo alegando la falta de reconocimiento deportivo y al encontrarlo en proceso de liquidación judicial.
La Federación Colombiana de Fútbol (FCF), encabezada por el presidente Ramón Jesurún sancionado por la Superintendencia de Industria y Comercio por el escándalo de la reventa de boletas, ratificó en la jornada de hoy la decisión que tomó la Dimayor el pasado 25 de noviembre, de desafiliar al conjunto motilón de su organización según lo confirmaron diferentes medios bogotanos.
De momento, la institución deportiva que ya pagó la deuda de los 106 millones de pesos correspondientes a las acreencias laborales que dejó José Augusto Cadena entre el 31 de diciembre de 2018 y el 31 de agosto de 2019, y que costaron la suspensión del reconocimiento deportivo, continuará buscando los caminos para regresar al Fútbol Profesional Colombiano.
Por ahora, el liquidador Arturo Acosta Villaveces espera que el Ministerio del Deporte compruebe todos los pagos y que levante la suspensión para acercarse a los entes rectores del fútbol nacional.
Es necesario recordar que por medio de un auto emitido el pasado 11 de marzo, la Superintendencia de Sociedades amplió la autorización que tenía el equipo para explotar su objeto social y del mismo modo, impuso una medida cautelar de embargo del derecho de afiliación, popularmente conocida como ficha.
La decisión de la FCF es una consecuencia esperada, puesto que aún no es un hecho que el equipo tenga reconocimiento deportivo y todo pareciese indicar que desde ambas organizaciones se está protegiendo a Cadena.