Liverpool tiene un ambicioso plan de negocios que ejecuta dentro y fuera de la cancha. Lo que sucede en el campo de juego resulta más que evidente: campeón de la Champions League y del Mundial de Clubes; actual líder de la Premier League con 13 puntos de ventaja sobre el segundo.
Marcelo Gantman
Antes de todo eso las cosas marchaban bien: en la temporada 2017-18 perdió la final de la Champions y quedó segundo en la Premier en un campeonato en el que acumuló 97 puntos.
Lo que sucede fuera del campo también es evidente: Liverpool es un club que pulveriza las métricas en las redes sociales y es vanguardista en la tarea de capturar fanáticos por el mundo. Jürgen Klopp gestiona la gloria deportiva. Peter Moore se ocupa de administrar el resto de los activos.
Moore es CEO de Liverpool desde febrero de 2017. Fue reclutado por su pasado en áreas de marketing y ejecutivas de Reebok, SEGA, la división de entretenimiento interactivo de Microsoft y especialmente por sus seis años al frente de EA Sports.
Liverpool, el club de la de la ciudad en la que surgieron Los Beatles, se llevó a un experto en consolas de videojuegos y en conectar con las audiencias juveniles. La especialidad del municipio, sesenta años después.
YouTube anunció a Liverpool como la primera propiedad deportiva global en lanzar un sistema de membresía pago para ofrecerle contenidos exclusivos a sus suscriptores.
Por un costo de 0.99 libras (1,29 dólares) los fanáticos accederán a material de backstage, cuatro programas semanales producidos por el club y otros contenidos que no se verán en el canal que Liverpool ya tiene en la plataforma y que cuenta con 3,7 millones de suscriptores.
Solo en 2019 se vieron más de mil millones de horas de videos oficiales en You Tube. Si el club quisiera publicar avisos con el sistema AdSense en su canal “free”, podría ganar un estimado de 600 mil dólares mensuales por esa vía.
Otro impacto clave de Liverpool se encuentra en Tik Tok: desde su lanzamiento al frenético ecosistema del video corto, hace 5 meses, el club inglés ya tiene 1,1 millones de seguidores Barcelona con 1,7 millones lidera el rubro. Liverpool acumula en Tik Tok más de 81 millones de videos visualizados con sus correspondientes 6,5 millones de “likes”.
La tendencia habitual sugiere explicar el éxito en las redes sociales como consecuencia de los buenos resultados del equipo. Sin dudas eso contribuye, pero ninguna estrategia digital exitosa descansa sobre una campaña deportiva. Peter Moore, desde su oficina, orientó las operaciones de Liverpool en ese sentido.
En una entrevista ofrecida en octubre pasado al diario El Pais, Moore puso en palabras el “clima de época” que envuelve a los jóvenes con relación al fútbol. El periodista Diego Torres fue directo con la pregunta y Moore lo fue con la respuesta:
“-Usted observó que el Fortnite, como símbolo de la atracción que ejercen los juegos electrónicos sobre los jóvenes, supone un desafío para el negocio del fútbol. ¿Qué tienen que ver los juegos electrónicos con una industria como el fútbol, que se fundamenta en los sentimientos?
-Que ambos competimos por el tiempo de atención de los jóvenes. Los ritos de paso de muchas generaciones se relacionaban con el día en que tu padre te llevaba al partido. Ibas al campo, tu padre te presentaba al equipo y no había negociación posible. Sea cual fuese ese equipo, sería tu equipo. Eso ya no sucede. No porque a los jóvenes no les interese el fútbol, sino porque la oferta es más amplia a través de la conectividad. Pueden hacer muchas otras cosas en la vida: pueden navegar, pueden relacionarse en las redes sociales… Lo observas en la emergencia de los juegos electrónicos: una industria de 240.000 millones de dólares. ¡No hay tiempo! Esa es la clave. Competimos por el tiempo. Competimos por los periodos en los que podemos permanecer atentos a algo..”
Liverpool anunció un nuevo plan de remodelación de Anfield para sumar 7 mil butacas y llevarlo a 61 mil espectadores. Mientras tanto, Peter Moore piensa en los fanáticos de todo el mundo que siguen al club a la distancia: en septiembre pasado anunció una inversión a tres años de 16 millones de dólares en soportes tecnológicos para alcanzar con mayor precisión a esa audiencia global. El club cuenta con el respaldo de 150 entidades de la ciudad que comprenden que el Liverpool es un gran atractivo para ver al equipo y no marcharse de la ciudad.
“Nadie llega a 771 millones de fanáticos sin tecnología. Vamos a implementar más recursos en experiencias digitales, atención a clientes y sistemas globales de pago. De eso se ocupan las casi 800 personas que trabajan para el Liverpool y que no patean una pelota”, dijo Peter Moore. Todo lo que sea con pelota está a cargo de Klopp. Un club equilibrado en las dos áreas.