Un jugador de Rugby del equipo Aguará Guazú, en Argentina, recibió una dura sanción y fue suspendido por 99 años al ser encontrado responsable de haber mordido y cortado un dedo a un rival durante un partido oficial jugado contra Corsario.
La URT difundió el boletín semanal donde se informa que Víctor Macías, jugador de Aguará Guazú recibió la inhabilitación absoluta para jugar al rugby por 99 años, debido a la lesión sufrida por Daniel Contreras, de Corsario, al que le cortaron la falange superior del dedo meñique de la mano izquierda.
Macías fue indicado desde un primer momento como el responsable de haber mordido el dedo de Contreras, a quien los médicos no pudieron reubicar la pieza cortada.
Dirigentes de Aguará Guazú y compañeros de Macías confiaban hasta esta noche que la sanción no iba a ser tan dura ya que sostienen que nadie pudo confirmar que la lesión de Contreras se produjo por una mordedura y aseguran que fue producto de un pisotón de un compañero de la víctima en medio de un ruck.
“Yo estaba a la par de la jugada y vi todo”, aseguró Mauro Campra, jugador de los “Zorros”, quien aclaró que “no hay forma de que mi compañero le haya arrancado el dedo de un mordisco al de Corsarios”.
Los dirigentes de Aguará Guazú fundamentaron su descargo a favor de Macías a partir del informe elevado por el árbitro del encuentro, Fernando Martorell, quien sostuvo que no observó sangre en la boca del agresor, versión que había trascendido luego del encuentro.
Walter Barrionuevo, presidente de Aguará Guazú. también salió en defensa de Macías al sostener que “Víctor es un chico totalmente sano, que vive el rugby a pleno y está en el club desde hace nueve años.
“Yo fui su entrenador y lo conozco bien” señaló Barrionuevo, quien explicó que el jugador sancionado es de condición humilde ya que “trabaja de albañil junto con su padre y estudia profesorado de Educación”.