El Bahía de Brasil usará el uniforme manchado de petróleo con la premisa de “El problema es tuyo, el problema es nuestro”, así lo señala en un comunicado, acompañado con la foto de su uniforme tricolor -azul, blanco y rojo- con grandes manchas negras en los costados
El Bahía usará este lunes en un partido del campeonato brasileño de primera división un uniforme con diseños de manchas de petróleo para sensibilizar a los hinchas sobre la contaminación de origen desconocido que afecta más de 2.000 km de costas del país, anunció el equipo.
“El problema es tuyo, el problema es nuestro”, señala el Bahía en un comunicado, acompañado con la foto de su uniforme tricolor -azul, blanco y rojo- con grandes manchas negras en los costados.
“¿Quién derramó ese petróleo? Quién será castigado por tal irresponsabilidad?”, cuestiona el equipo, dos veces campeón de Brasil (1959 y 1988).
En el marco de la 27ª fecha, Bahía se medirá en Salvador (la capital del estado) contra Ceará, otro equipo del nordeste brasileño afectado por un misterioso derrame de petróleo que ha contaminado unas 200 playas desde inicios de septiembre, según la agencia ambiental Ibama.
“Jugaremos (…) con la camisa del ‘escuadrón’ manchada de petróleo”, agrega el equipo, que subastará los uniformes de los jugadores para recaudar fondos y ayudar en la limpieza del litoral.
La Marina indicó que ya se han recolectado más de 525 toneladas de crudo.
Los residuos empezaron a detectarse el 2 de septiembre y en los últimos días alcanzaron la paradisíaca playa de Carneiros, en el estado de Pernambuco, al norte de Bahía.
Las autoridades temen que el hidrocarburo llegue al balneario Porto de Galinhas, otro popular destino turístico entre brasileños y extranjeros.
Según las autoridades de Pernambuco, los residuos petroleros recogidos son llevados a centros de reciclaje para ser usados en actividades de construcción.
Las causas de la contaminación todavía se están investigando, aunque los análisis confirman que el petróleo es de origen venezolano.
Entre otras hipótesis, los investigadores analizan la posibilidad de que la fuga provenga de un “barco petrolero fantasma” que transportaba hidrocarburos clandestinamente, para burlar el embargo impuesto por Estados Unidos a Venezuela.