El ciclismo es un deporte que se mantiene activo durante todo el año en Venezuela; numerosas competencias se realizan en diferentes partes del territorio nacional, avivando al calendario competitivo criollo. Sin embargo, al parecer estos eventos no han podido concretar su finalidad, la de potenciar a la disciplina y llevar a nuestros corredores a los sitiales de honor a nivel internacional.
Muchos aspectos que analizar y para encender los bombillos rojos de las alarmas quedaron tras el recién concluido Campeonato Panamericano de Ruta, en el cual Venezuela solo pudo obtener una medalla de bronce, a pesar de ser el dueño de la fiesta y ofrecer todas las garantías para sus propios atletas, fueron otros –los invitados- quienes se llevaron los honores. Si algo se puede rescatar como logro nacional en este Campeonato Panamericano fue la organización del mismo, la cual estuvo a la altura de un evento de tal envergadura; un esfuerzo que realizaron la Federación Venezolana de Ciclismo, Asociación Tachirense, Ministerio del Deporte y Gobernación del Estado Táchira.
Ahora lo negativo se trasladó a lo deportivo, la contrarreloj y la ruta fueron escenificadas en trayectos ya conocidos por los integrantes (cuerpo técnico y ciclistas) del seleccionado patrio; la primera en Rubio y la segunda en San Cristóbal, etapas habituales en la Vuelta al Táchira en Bicicleta, lo que debería indicar la familiarización con las mismas, cosa que no se demostró. Además del giro andino, la Federación Venezolana de Ciclismo (FVC), en compañía de las diferentes asociaciones, organizan certámenes de “primera” como la Vuelta a Venezuela, Vuelta de la Juventud, Clásico de La Consolación, Vuelta a Trujillo, Tour Femenino, entre otros, los cuales no han arrojado ningún resultado positivo para el calapedismo criollo. Para el lamento quedó el ciclismo femenino, pues su actuación fue prácticamente nula. Ninguna de sus exponentes estuvo tan siquiera cerca de los lugares de podio.
Yonnattan Monsalve maquilló esta penuria al conquistar una medalla de bronce en la modalidad de ruta Élite; y Carlos Molina estuvo a un tris de otra bronceada en la Sub 23; esto fue lo más resaltable, deportivamente, de Venezuela en el Panamericano.
Colombia confirmó su buen momento ciclístico al titularse monarca del Campeonato Panamericano de Ciclismo de Ruta, luego de ubicarse en la primera casilla del medallero general de la competencia, al registrar un total de ocho presas, divididas en dos de oro, tres de plata y tres de bronce. Chile se ubicó segundo con dos medallas doradas; doblete logrado por el Sub 23 José Rodríguez. Ecuador y Cuba compartieron la tercera casilla; Argentina quedó quinta con una plata, mientras que en la sexta posición hubo un triple empate entre Brasil, México y Venezuela con un bronce, por cabeza.
(Favio Hernández)