El campeón mundial de peso pesado Deontay Wilder, volvió a dejar declaraciones polémicas en la rueda de prensa antes de enfrentarse a Dominic Breazeale, a quien amenazó sin reparos.
“La vida de Breazeale está en juego en esta pelea y me refiero a su vida. Todavía estoy tratando de conseguir un cuerpo en mi palmarés”, dijo sorpresivamente en un primer momento.
No es la primera vez que el boxeador envía este tipo de mensajes a sus rivales antes de enfrentarlos, ya que en abril del 2018 dijo “quiero un muerto en mi currículum” antes del combate contra Tyson Fury.
“Todavía estoy tratando de conseguir un cadáver en mi registro. Planeo golpearlo, lo sacaré de allí de una manera que nunca ha visto nadie”, fueron las temerarias palabras de Wilder.
Al escuchar esto, los periodistas le preguntaron qué pensaría su público sobre estas declaraciones. A lo que él respondió con el mismo tipo de mensajes.
“Dominic Breazeale pidió esto, no fui a buscarlo. Él [me buscó]. Entonces, si llega, pues llega. Este es un deporte brutal, no es un deporte de caballeros”, dijo.
Pero lo que llamó más la atención fue su concepto del boxeo. “En este momento en particular, tenemos mala sangre el uno contra el otro. Este es el único deporte en el que puedes matar a un hombre y cobrar por ello al mismo tiempo. Es legal. ¿Por qué no usar mi derecho a hacerlo?”, sentenció.
Deontay Wilder es un boxeador invicto estadounidense y es el actual campeón mundial de los pesos pesados del Consejo Mundial de Boxeo.