Edwin Duarte, joven promesa del beisbol tachirense, se suma a la lista de víctimas que ha dejado la actual coyuntura política y social del país, al resultar impactado por la bomba molotov lanzada por un desconocido al interior del vehículo de transporte público que circulaba por la avenida Libertador el pasado miércoles, cuando se dirigía a su entrenamiento en el estadio Táchira de La Concordia.
Duarte fue identificado como la cuarta víctima del suceso, en el que también salieron afectados otros tres adultos –dos mujeres y un hombre- y hoy por hoy su estado de salud es de cuidado, pues tiene el 40 por ciento de sus brazos afectados con quemaduras de segundo grado, el más comprometido es justamente el izquierdo, su brazo fuerte para lanzar.
Juan Alberto Martínez, presidente de la Asociación Tachirense de Beisbol, lamentó la situación del joven, quien por su talento era un asiduo seleccionado regional, y que ahora ve truncada su participación en el campeonato clasificatorio para los Juegos Nacionales, a celebrarse a partir del 18 de mayo.
El dirigente del béisbol regional agradeció el apoyo que ha brindado el Gobierno Regional a través del Instituto del Deporte, que se ha comprometido a correr con todos los gastos médicos del joven beisbolista, quien se encuentra recluido en una clínica privada de la ciudad, a la espera de que responda positivamente a las primeras 48 horas de tratamiento.
“Este fue un suceso muy desafortunado. Decidimos mover los entrenamientos del Metropolitano al estadio Táchira justamente para facilitar el traslado de los atletas por la propia dificultad del transporte. Él venía a la práctica que comenzaba a las dos de la tarde. Lamentamos profundamente lo que le ha sucedido y esperamos que su juventud le ayude a recuperarse pronto y que pueda volver a jugar otra vez”, sostuvo Juan Alberto Martínez. (MJS)