Los errores y la falta de ofensiva hundió a Tiburones de La Guaira, barridos por Caribes de Anzoátegui, en la serie final del campeonato de Béisbol Profesional, que coloca a los orientales en su sexta final en diez años, mientras que para los salados, un nuevo fracaso luego de pasar como primeros, en la ronda eliminatoria.
Gustavo Carrillo
Caribes se imponen con pizarra de 5×4, aprovechando las pifias de sus rivales. En el mismo primer tramo, los indígenas anotaron trío de carreras, con par de embasados por las pifias del infield de Tiburones, y luego batazo que limpió las bases de Christian Pedroza, que prácticamente le dio cifras al compromiso. Un jonrón solitario de Balbino Fuenmayor, colocó la pizarra 3×0.
La Guaira descontó con par de carreras en la apertura del cuarto, y con dos más en el séptimo, igualaron las acciones, para un duelo de lanzadores a partir de ese episodio.
No se dieron las cosas para Tiburones. En los cuatro compromisos frente a Caribes, la ofensivo no cumplió su trabajo, y a ese problema se sumó el de los errores, que no ocurrió a lo largo de la temporada regular.
Caribes, equipo que pasa a una final, luego de disputar el comodín con Navegantes del Magallanes, se convierten en finalista, y ahora descansa mientras espera el resultado de la serie, Aguilas del Zulia y Cardenales de Lara, que dominaban los crepusculares 3-1.
El trabajo del abridor de La Guaira, el derecho Félix Dubront, durante seis episodios no encontró con el respaldo de la ofensiva, y además, par de errores del infield, le complicaron su labor en el mismo primer tramo. El relevo no pido preservar el empate, y en el cierre del noveno tramo, los indígenas colocaron tres hombres en circulación para el turno de Denis Phipps quien se convierte en héroe, al recibir boleto del “bombero”, Hassan Pena, lanzador que dejó muchas dudas de su trabajo, al concederle boleto al bateador en turno para forzar la quinta y ganadora carrera de los orientales.
Fracasan nuevamente los Tiburones de La Guaira, conjunto que se mostró compacto en todos sus departamentos, eliminando a semifinales a Leones del Caracas, pero mostrando carencias en la semifinal frente a Caribes de Anzoátegui. En los cuatro compromisos de la semifinal, apenas anotó nueve carreras y con esa producción no se puede estar en una final.
Cardenales, vuelan alto. En el estadio, Luis Aparicio, El Grande, de Maracaibo, Cardenales de Lara, valiéndose del trabajo monticular del derecho Néstor Molina, y apoyo de sus compañeros, derrotaron a las Aguilas del Zulia 8×2, y colocaron la serie a su favor, 3-1, a expensas de una victoria para estar en la final.
Molina coqueteó con un juego sin hits ni carreras hasta el séptimo tramo, cuando Olmo Rosario inició ese tramo con un batazo de dos bases, para luego anotar en carrera, y llevar esperanzas a las tribunas aguiluchas, pero no pasó de un conato de los locales.
Par de carreras en la apertura del segundo acto y trabajo dominante de Molina, cerró las posibilidades de las aves. Cifras definitivas se obtienen en la apertura del tramo, cuando la ofensiva cardenales logra un rally de cinco carreras y coloca el juego 8×2.
La ofensiva de Cardenales de Lara funcionó con Ildemaro Vargas y Yordanis Lares, Osman Marval con su segundo cuadrangular en la final, Carlos Rivero y Jackson Flores. El relevo cumplió su trabajo en los brazos de Gumersindo González, Vicente Campos y Jesús Sánchez. Ganó en trabajo de seis episodios, Félix Dubront con derrota para César Jiménez en labor de cinco entradas, permitiendo par de carreras. (GC)