“Al que madruga, Dios lo ayuda”. Poniendo en práctica ese refrán, la selección Venezuela que acudirá a los Juegos Centroamericanos y del Caribe, a disputarse en Barranquilla, Colombia, inicia su trabajo.
Una tarea que debe ser de inmediato, por los compromisos que asume la representación al asistir a la importante cita, y enumerando las posibilidades de triunfo, en una competencia donde se concentran países con tradición en el deporte de las cuatro esquinas.
Edwin Hurtado, mánager de nuestra representación, en compañía de Juan Alberto Martínez, vicepresidente de la Federación Venezolana de Béisbol, vino al Táchira en trabajo de aportar conocimientos a la disciplina y aprovechó para conversar con Diario La Nación.
Habla del trabajo que debe cumplir todo el equipo. De la responsabilidad que asume al convertirse en timonel de la selección, con muchos objetivos importantes en los Juegos de Barranquilla.
Hurtado tiene experiencia en el béisbol. Trece años lanzando con Cardenales de Lara, tres con Leones del Caracas, en el béisbol venezolano, además de jugar con Azulejos de Toronto y Marineros de Seattle.
Luego de un intenso ir y venir como pelotero activo, el exlanzador se inclina por la parte técnica y acompaña al cuerpo técnico al Mundial Premier, como coach de banco de Luis Sojo, en competencia que se disputo en China, además de estar en los Bolivarianos de Barranquilla.
Ahora asume la responsabilidad de dirigir la selección de mayores para ir a Barranquilla, esta vez a los Juegos Centroamericanos y del Caribe.
Cita en Macarao
Considera Hurtado que no hay tiempo para el descanso. Y desde la próxima semana convocará a un grupo de peloteros para iniciar el trabajo de entrenamientos en el campo de Macarao, y la dirigencia de la pelota caliente hará los contactos necesarios, a ver si se pueden cumplir varias sesiones en el Estadio de la Ciudad Universitaria.
Al primer módulo de labor -dice- deben asistir unos 45 peloteros, en su mayoría profesionales, que no lograron contrato fuera del país, y un grupo de jóvenes, para sacarles chispas a esos primeros batazos.
La tarea debe ser intensa. “En Barranquilla -agrega el estratega- vamos a conseguir mayor potencial, contrario a lo ocurrido en los Bolivarianos”. En la próxima cita se reunirán las delegaciones de México, Puerto Rico, República Dominicana, Nicaragua, Panamá, Cuba, combinados fuertes en este deporte.
Las primeras semanas de entrenamientos deben dejar buenos resultados. A mediados de mayo, con una selección que no es la definitiva, viajarán a Barranquilla para intervenir en un cuadrangular en la inauguración del estadio donde se jugará esa disciplina, estando además Puerto, Rico, Cuba y Colombia.
Para Hurtado, dirigir la selección de Venezuela es un reto, dice en este caso, Juan Alberto Martínez, porque recibe al combinado en la casilla 11ª del ranking mundial, y al perder un escalafón, va a desaparecer de esa lista importante y pone en peligro su participación en competencias internacionales.
Esa responsabilidad va más allá de salir airosos en los Centroamericanos, porque luego se enfrentarán al reto que significa estar en el Mundial de Nicaragua, reservado para la categoría Sub-23, camino a los Juegos Olímpicos de Japón.
Dentro del programa de preparación, estiman conveniente realizar juegos de fogueo con selecciones cercanas y, en primera instancia, piensan en la Liga Bolivariana de Béisbol.
Para cumplir la misión encomendada por la Federación Venezolana de Béisbol, ir, ver, jugar, triunfar y regresar con la medalla de oro, acompañarán a Edwin Hurtado en el cuerpo técnico; Héctor Muchilanga como coach en la esquina caliente, Eudys Hurtado en la inicial y Carlos Leal como coach de pitcheo.
No es fácil el trabajo. Por los menos, dos meses y medio en pleno entrenamiento, con jóvenes y veteranos, que pasan por un filtro para escoger lo mejor. Así debe ser.
Gustavo Carrillo