La luchadora Polyana Viana demostró el pasado sábado 5 de enero la utilidad de las artes marciales mixtas para la autodefensa cuando fue víctima de un intento de robo en las calles del barrio de Jacarepagua en Río de Janeiro. Viana relató al portal especializado ‘MMA Junkie’ cómo se produjo el asalto. “Yo estaba esperando un Uber cuando un hombre se me acercó de forma furtiva, se sentó a mi lado y me preguntó la hora”, explica la luchadora, vecina de Rio desde hace dos años.
“Le di la hora y vi que no se iba a ir, así que sospeche y me giré para guardarme el móvil en el bolsillo cuando me dijo “dame el teléfono y no hagas nada raro porque voy armado” a la vez que ponía su mano sobre un objeto”, relata Viana, que pensó que si era una pistola de verdad no iba a tener tiempo a apuntarla si reaccionaba rápido al estar sentados tan cerca.
“Me puse de pie, le di dos puñetazos y una patada para tirarle al suelo y ahí le inmovilicé con una técnica de estrangulación agarrándole el cuello por detrás de la espalda”, cuenta la luchadora con récord de 10-2 en combates de MMA (y 1-1 en la franquicia UFC).”Yo estaba bien y a él se le veía asustado. Me pidió que le soltara, que sólo me había pedido la hora y yo le dije que “la hora, mis cojones” y que no le iba a soltar hasta que llegase la policía”. El propio asaltante, que resultó portar una pistola falsa de cartón, le suplicó que llamase a la policía por miedo a recibir más golpes y un transeúnte que presenciaba la escena fue el encargado de realizar la llamada.
la peleadora de la UFC, de 26 años, explicó: “Luego puso su mano sobre una pistola, pero me di cuenta de que (su mano) era demasiado suave”.
“Estaba muy cerca de mí. Así que pensé: ‘Si es un arma, no tendrá tiempo de sacarla’. Así que me levanté. Tiré dos golpes y una patada. Cayó, luego lo atrapé con una toma. Después lo senté en el mismo lugar donde estábamos antes y le dije: ‘Ahora esperaremos a la policía'”, contó Viana, quien aguarda seguir destacando en la UFC.
Viana, quien se dedica a las MMA desde el 2013 y que pelea en la UFC desde 2018, confesó que cuando redujo al asaltante este le suplicó que lo dejará irse: “Sólo te estaba pidiendo la hora”. Pero esta no es la primera vez que la luchadora brasileña, pues cuando vivía en Belem, hace algunos años, detuvo a dos hombres que le quisieron robar el celular en una motocicleta.