Todo lo que podía salir mal, salió mal. El CSKA Moscú vapuleó al Real Madrid en el Santiago Bernabéu, con un 0-3 para el recuerdo que deja en muy mal lugar la ‘resurrección’ que intenta buscar Florentino Pérez con Santiago Solari en el banquillo.
Ridículo histórico el que protagonizó el Real Madrid este miércoles en el Santiago Bernabéu, al caer goleado por 0-3 en una última jornada de fase de grupos de la Champions League que debía ser intrascendente… Y no lo fue. Los goles de Chalov, Schennikov y Sigurdsson provocaron un terremoto en la capital madrileña. Pitos y más pitos de la afición a sus propios jugadores, y en especial a un Isco que se encaró con la grada.
Los blancos dieron la talla en los primeros 30 minutos de juego, poniendo en apuros a la defensa del CSKA de Moscú y con Marco Asensio y Vinicius Jr en plan estrella, sacando los aplausos a los aficionados. Parecía que sería un trámite fácil para el Real Madrid, y que los merengues se ‘vengarían’ de la derrota que ya sufrieron en Rusia (1-0) en la primera vuelta de la fase de grupos.
Lo que tenía que ser un sueño plácido, sin embargo, se tornó en pesadilla. Chalov y Schennikov marcaron dos goles en apenas seis minutos, al filo del descanso, y con el resultado de 0-2 se llegó al final de los primeros 45 minutos. La grada no perdonó la falta de concentración a los suyos, y aprovechó para lanzar reproches y algún que otro insulto desde las gradas del Bernabéu.
Con aires renovados pareció salir el Real Madrid en la segunda mitad, al buscar la portería del CSKA de Moscú para ‘reconciliarse’, si es que podía hacerlo, con una afición que ya no perdona una. Los blancos atacaron, y Solari dio entrada a titulares habituales como Gareth Bale y Toni Kroos para intentar equilibrar cuanto antes el marcador.
El hecho de que el Real Madrid se marchara tan arriba para intentar marcar, no obstante, le pasó factura en el ámbito defensivo, y el CSKA fue capaz de transformar el tercer gol a falta de un cuarto de hora para el final del partido, obra de Sigurdsson. El Real Madrid se convirtió en un muñeco de trapo en manos de los rusos, que no dudaron en hacer sangre.
Para ellos el partido no era de trámite, ni mucho menos, pues se jugaban acceder a la UEFA Europa League como terceros de grupo. Por eso salieron tan enchufados y aprovecharon la relajación conjunta de un Real Madrid que, recordemos, ya demostró no ser ‘invencible’ con Solari en el banquillo cuando cayó por 3-0 ante el Eibar en LaLiga Santander, hace unas jornadas.
Bale podría estar lesionado, y hay ‘mal rollo’ con Isco
El colmo de los colmos para los blancos fue la posible lesión de Gareth Bale, que se dolió ostensiblemente en la segunda mitad, y un supuesto mal gesto de Isco Alarcón contra la grada del Santiago Bernabéu, al asegurar medios como ‘Marca’ que el malagueño se habría encarado con sus propios aficionados, quizás al oír palabras malsonantes hacia su persona. Sea como sea, y en mitad del incendio, lo único bueno para el Real Madrid es que, por fortuna, no se jugaba nada a nivel clasificatorio. Será primero de grupo rumbo a los octavos de Champions League.
SIGUIÓ EL BAILE EN LA ZAGA MERENGUE#ChampionsxFOX El CSKA Moscú bailó en su área al Real Madrid, y Sigurdsson venció a Courtois pic.twitter.com/r0BVml1VXT
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AY REAL MADRID… TODO EMPEZÓ POR UN SAQUE DE MANOS#ChampionsxFOX El gol de 'fantasía´del CSKA Moscú en el Santiago Bernabéu…
Incluyendo un 'baile' y 'taconcito' ante la defensa Merengue pic.twitter.com/EsfM4T8g4u
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