El fútbol a veces tiene historias que no dejan de sorprendernos. Esta historia tiene que ver con un árbitro que no se le ocurrió mejor método para determinar el saque inicial que someter a los capitanes al famoso juego de niños piedra, papel o tijeras.
En tiempos modernos donde ya vemos que la mayoría de las competiciones están usando la tecnología como por ejemplo el VAR, al árbitro inglés David McNamara, optó por usar algo más humano para saber quién tendría derecho a hacer el saque inicial en un partido entre el Manchester City y el Reading de la liga femenina de Inglaterra.
McNamara recibió una suspensión por haber olvidado en el vestuario la tradicional moneda para realizar el sorteo previo al encuentro. En virtud de no disponer de demasiado tiempo dadas las urgencias de la transmisión televisiva, y ante la sorpresa de sus colaboradores, instó a las jugadoras a realizar el tradicional juego de “piedra, papel y tijera” para determinar quién pondría en movimiento el partido. Las capitanas cumplieron su parte con naturalidad y ganó Stephanie Houghton, del City: con piedra, aventajó a Kirsty Pearce, que optó por tijera.