Un ‘Súper Mario’ Mandzukic fue suficiente para que Croacia se deshiciera de Inglaterra con un 2-1 en tiempo extra, este miércoles en las semifinales, y clasificara a la final del Mundial de Rusia-2018 para enfrentarse con Francia.
Los balcánicos, en su quinta participación en una Copa del Mundo, se impusieron en el apretado duelo en el estadio Luzhnikí en Moscú, escenario de la final el próximo domingo, con los goles de Iván Perisic, a los 68 minutos, y Mandzukic, a los 109.
Kieran Trippier había puesto en ventaja a los ‘Tres Leones’ de espectacular tiro libre a los 5 minutos.
Con la victoria, el seleccionado dirigido por Zlatko Dalic, de 51 años, superó a aquel de Davor Sucker, Zvonimir Boban y Robert Prosinecki que terminó tercero en Francia-1998 en su primera Copa del Mundo tras la independencia del país siete años antes.
Croacia sufrió lo impensado para equilibrar el juego que controlaban a placer los Pross, hasta cuando éstos se permitieron un pestañeo que desencadenó la furia de los ‘Vatreni’.
Para Inglaterra la derrota supone un duro golpe en su objetivo de ganar el segundo título mundial 52 años después de que lo hiciera el legendario elenco de Bobby Charlton, Bobby Moore y Gordon Banks en el Mundial-1966, del que los ingleses fueron anfitriones.
Los inventores del fútbol se encontrarán con los ‘Diablos Rojos’ belgas el próximo sábado en San Petersburgo en el partido por el tercer lugar.
– Furia inglesa –
Impulsada por una gran mayoría de aficionados, los Pross empezaron el partido con mayor determinación, se hicieron rápidamente de la pelota y empujaron a Croacia contra su campo a partir de la buena movilidad de un activo Dele Alli en la mitad.
Esa presión alta generó la apertura del marcador a los 5 minutos, un tiro libre que Trippier ejecutó en la frontal del área al palo izquierdo de Danijel Subasic, luego de una falta de Luka Modric a Alli cuando éste buscaba perfilarse en velocidad para rematar.
A partir de ese gol se vio lo mejor de Inglaterra, sometiendo con un planteo intenso y dinámico a Croacia, en la que ni Modric ni Ivan Rakitic entraron en sintonía, dificultando la progresión de los balcánicos en la primera mitad.
Los ‘Tres Leones’ incluso pudieron ampliar el marcador a los 30 minutos, pero el goleador Harry Kane falló en el mano a mano con un Subasic que se jugó la vida para salvar su arco en sendos remates en el área pequeña.
– Pestañeo y despertar –
Inglaterra mantuvo el ritmo intenso en los primeros 20 minutos del complemento, bien posicionado en el campo y dejando poco espacio para el tránsito de los croatas, que apenas sostenían la pelota en el círculo central pero sin panorama para algo más.
Pero los hombres de Gareth Southgate se permitieron un pestañeo cuando tenían controlado el juego y le dieron vida a los balcánicos a los 68 minutos con un tanto de Perisic.
El volante del Inter de Milán se anticipó a Kyle Walker en el corazón del área y casi con la planta del pie izquierdo empujó la pelota a un centro desde la derecha de Sime Vrsaljko.
Los Pross acusaron el golpe porque Croacia despertó y creyó en que podía quedarse con la victoria, y estuvo a poco del segundo otra vez con Perisic a los 72 con un remate que se estrelló en el palo.
Los 90 minutos se consumieron y llegaría el tiempo extra y, en un desarrollo tenso de ida y vuelta, Mandzukic se convirtió en el nuevo héroe croata a los 109 con un gol muy a su estilo, ganándole la espalda a los centrales para quedar de frente ante el golero.
Perisic peinó una pelota, John Stones perdió la marca del ‘Súper Mario’ y el de la Juventus no perdonó en el área para fusilar al rubio Pickford.
Final de la batalla de Moscú: Croacia a su primera final de Copa del Mundo, Inglaterra rozó la hazaña pero su maldición sigue vigente.